IndyCarJ. R. Hildebrand, segundo piloto de Dreyer & Reinbold en la Indy 500

A falta de un mes para el inicio de los entrenamientos oficiales en Indianápolis, sus famosas 500 millas siguen registrando nuevos participantes, de cara a la que será la edición con más inscritos desde 2011. Aquel fue el último año en el que Dreyer & Reinbold, equipo que sólo ha competido en esta carrera durante los últimos cuatro años, alineó más de un monoplaza. En esta edición, y con miras a volver a competir a tiempo completo el próximo, volverán a tener más de una bala, en esta ocasión con un segundo coche para el estadounidense J. R. Hildebrand.

Tal y como apuntaban los rumores y las informaciones desde hace varios meses, Hildebrand ha sido confirmado este jueves por el equipo de Dennis Reinbold y el ex piloto Robbie Buhl, en el que acompañará al también estadounidense Sage Karam. Con su confirmación, ya son 34 los inscritos para la carrera, lo que garantiza que al menos un piloto se quedará sin disputarla, y la lista podría alcanzar los 36 en próximas fechas con las esperadas confirmaciones de James Davison y Buddy Lazier.

Luciendo el número 66, el piloto de 30 años regresa así al equipo que le dio su primera oportunidad en IndyCar en 2010 al disputar dos carreras como uno de los muchos sustitutos del lesionado Mike Conway, siendo 16º en Mid-Ohio antes de retirarse en Sonoma tras ser golpeado por Marco Andretti. "Estoy muy motivado por volver con este equipo. Dennis fue el primero en llamarme para jugar en las grandes ligas, tiene un montón de grandes tipos con los que ya he trabajado antes, y han sido muy rápidos con (Karam) estos últimos años".

Antaño campeón de la U.S. F2000 (2006) y la Indy Lights (2009), la carrera de Hildebrand está estrechamente ligada a las 500 millas de Indianápolis al protagonizar uno de los errores más dramáticos de la historia del automovilismo. El novato lideraba la prueba de 2011 gracias a una buena estrategia en boxes sin presión por detrás, pero un fallo de cálculo al pasar al coche doblado de Charlie Kimball le hizo golpear el muro en la última curva, y aunque cruzó la meta con tres ruedas, Dan Wheldon lo hizo cuatro segundos antes. El campeón británico, que no tenía un asiento a tiempo completo esa temporada, perdería la vida cinco meses después en el fatídico accidente de Las Vegas, en el cual Hildebrand se vio involucrado en el contacto inicial que desencadenó la melé.

Dos años después, Hildebrand se accidentó en la cuarta vuelta de la Indy 500, y Panther Racing le despidió, habiendo sumado solo cinco top 5 en 37 carreras. Tras disputar dos pruebas más ese año con el equipo de Bryan Herta, su trayectoria pasó a estar ligada a Carpenter, equipo para el que ejerció de "piloto probador" corriendo solo en Indianápolis durante tres años, terminando siempre entre los 10 primeros. El año pasado heredó la vacante dejada por Josef Newgarden a tiempo completo, y ofreció un rendimiento óptimo en óvalos, subiendo al podio en Phoenix e Iowa (donde estuvo cerca de ganar) y liderando vueltas en Indianápolis y Iowa. No obstante, esos podios fueron sus únicos top 10 del año, y terminó 15º en la general, por lo que Carpenter optó por prescindir de sus servicios. Tanto él como Karam, campeones americanos de Indy Lights defenestrados por oportunidades perdidas, tienen mucho en común, y mucho que reivindicar.

Parrilla de la 500 millas de Indianápolis 2018, a 12 de abril

(entre paréntesis, pilotos o coches no confirmados oficialmente)

(R): Novatos en las 500 millas de Indianápolis

Fotos: IndyCar Media