Hyundai y KIA se cansan de China y hacen un movimiento que amenaza con cambiarlo todo
Decididos a reducir su dependencia de los fabricantes chinos de baterías, Hyundai y KIA han iniciado movimientos estratégicos que podrían transformar el mercado global de los vehículos eléctricos. ¿Estamos ante el inicio de un nuevo capítulo en la industria automotriz?
En el vertiginoso mundo de los vehículos eléctricos, las marcas chinas dominan el mercado, especialmente en la producción de baterías, con gigantes como CATL y BYD acaparando gran parte de la cuota mundial.
Sin embargo, Corea del Sur, hogar de fabricantes como Hyundai y KIA, está empezando a dar pasos importantes para recortar distancias en esta carrera tecnológica.
Los últimos movimientos de estas marcas surcoreanas indican una clara intención de reducir su dependencia de proveedores chinos, lo que podría alterar drásticamente el panorama global de la industria automotriz.
La apuesta de KIA por la reducción de costes, tanto en materiales como en tecnología, puede cambiar las reglas del juego
Hyundai, hacia la independencia tecnológica en baterías
Hyundai Motor Co. ha comenzado a trazar su camino hacia la internalización de la producción de baterías para vehículos eléctricos. Según fuentes cercanas a la empresa, la compañía planea construir sus primeras líneas de producción de baterías para 2027.
Estas instalaciones, ubicadas en Anseong, provincia de Gyeonggi, contarán con una capacidad inicial de uno a dos GWh (gigavatios-hora), suficiente para alimentar aproximadamente 13.000 vehículos eléctricos.
Aunque inicialmente se centrarán en la producción de prototipos, este paso marca el inicio de una estrategia más amplia que busca reducir la dependencia de Hyundai de los proveedores de baterías actuales.
El desarrollo de sus propias baterías permitirá a Hyundai mejorar el rendimiento y la competitividad de sus vehículos eléctricos, optimizando el coste de producción y adaptando las baterías a las necesidades específicas de sus modelos.
Además, la internalización de esta tecnología facilitará su entrada en el mercado del reciclaje de baterías, una industria en crecimiento ante la necesidad de gestionar los residuos derivados del auge de los vehículos eléctricos.
KIA, una nueva era con la planta EVO
Por su parte, KIA no se ha quedado atrás. La marca del mismo grupo que Hyundai ha inaugurado recientemente su primera planta dedicada exclusivamente a la producción de vehículos eléctricos.
Esta planta, denominada EVO y situada en Gwangmyeong, simboliza el compromiso de KIA con la transición hacia una gama 100 % eléctrica. Con una capacidad de producción de 150.000 vehículos eléctricos al año, estas instalaciones serán clave en el lanzamiento de futuros modelos asequibles de la marca.
El primer fruto de esta planta es el KIA EV3, un SUV eléctrico que ha generado una gran expectación desde su presentación. Con un precio por debajo de los 30.000 euros en Corea del Sur y más de 10.000 reservas en su primer mes, el EV3 se posiciona como una opción atractiva para los compradores europeos, donde se ofrece desde unos 37.000 euros.
Además, con una autonomía de hasta 605 km según el ciclo WLTP, este modelo promete convertirse en uno de los referentes del mercado.
Pero el EV3 no es el único protagonista. KIA tiene en el horizonte otros modelos como el EV4, un sedán eléctrico que verá la luz en 2024 y que también se producirá en la planta EVO. Este modelo combinará tecnología con el EV9, el SUV insignia de KIA, pero se espera que mantenga un precio más asequible, similar al del EV3.
Un futuro marcado por los coches eléctricos asequibles
Uno de los grandes desafíos para Hyundai y KIA es la creación de vehículos eléctricos de bajo coste. KIA ya ha anunciado que está trabajando en el EV1, un modelo que saldrá al mercado en 2027 con un precio estimado por debajo de los 25.000 euros. Antes, en 2026, se espera la llegada del EV2, que debería rondar los 30.000 euros.
Estas cifras son ambiciosas, teniendo en cuenta que las baterías representan aproximadamente el 40 % del coste de producción de un vehículo eléctrico, pero la apuesta de KIA por la reducción de costes, tanto en materiales como en tecnología, puede cambiar las reglas del juego.
En paralelo, Hyundai también está avanzando en esta dirección con el lanzamiento del Hyundai Casper, un pequeño coche eléctrico que se espera llegue a Europa con un precio entre los 20.000 y 25.000 euros y una autonomía cercana a los 300 km.
Una amenaza para el dominio chino
El movimiento de Hyundai y KIA hacia la producción interna de baterías y la creación de vehículos eléctricos más asequibles supone un desafío directo a la hegemonía de las marcas chinas en el mercado de los vehículos cero emisiones.
Aunque BYD y CATL siguen liderando la producción global de baterías, la estrategia surcoreana pretende debilitar su dominio, especialmente en mercados clave como Europa y Estados Unidos, donde los consumidores están cada vez más interesados en alternativas a los fabricantes chinos.
Si bien Hyundai y KIA no están solos en esta carrera —Tesla, GM y Toyota también están invirtiendo en sus propias capacidades de producción de baterías—, el éxito de las marcas surcoreanas podría reconfigurar el mercado global de vehículos eléctricos en los próximos años.
Con un enfoque en la innovación tecnológica, la optimización de costes y la producción local, Hyundai y KIA están en camino de convertirse en actores clave de la industria automotriz del futuro.
Fuente: Forococheselectricos.com | Kedglobal.com