Hyundai explica las pruebas de invierno de los nuevos NEXO y Kona Eléctrico en Laponia
El fabricante coreano explica cómo ha desarrollado las pruebas de puesta a punto de sus dos nuevos modelos eléctricos, el NEXO alimentado con pila de hidrógeno y el sub-compacto Kona Eléctrico durante su estancia en Laponia, unos ensayos fundamentales para garantizar el perfecto funcionamiento bajo cualquier condición siendo capaces de arrancar el motor como cualquier coche hasta -30º.
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Publicado: 20/03/2018 10:00
Es uno de los primeros modelos del segmento B y C totalmente eléctricos que van a llegar a la categoría de los SUV durante el presente año 2018 y todo gracias al duro empeño que Hyundai está poniendo en el desarrollo de nuevos modelos propulsados con tecnologías alternativas, una estrategia con la que pretende alzarse como líder.
Los nuevos Hyundai NEXO y Kona Eléctrico están ya presentados y listos para su debut comercial. Los dos lo harán el próximo verano, aunque el segundo ya acumula miles de reservas de clientes en los países escandinavos -especialmente Noruega, una península donde el fabricante coreano cuenta con una base establecida para las pruebas de invierno que realiza sobre sus modelos, conocida como Hyundai Mobis Proving Ground, a sólo una hora en coche del Círculo Polar Ártico.
Y para el caso de estos dos eléctricos no ha sido menos, sino también un poco más agresiva dado que el sistema de propulsión eléctrica debe de funcionar bajo todo tipo de condiciones, incluido el frío extremo que se alcanza durante el invierno en las cercanías de Laponia, con hasta -35° C, y donde los modelos eléctricos se han sometido a unas rigurosas pruebas. A estas temperaturas tan extremadamente bajas el frío puede suponer un funcionamiento anómalo de los modelos eléctricos, especialmente la fase de arranque, el alcance de la temperatura óptima de funcionamiento del tren motriz, de la climatización o descender considerablemente la autonomía.
La experiencia lograda con el ix35 FCEV ha sido fundamental para que el nuevo NEXO vea la luz como un modelo de producción en serie a gran escala, dado que su antecesor equipó una tecnología de pila de hidrógeno capaz de soportar una temperatura máxima de -20º C, por lo que para poder garantizar un funcionamiento sin ningún tipo de problema a -30º -como cualquier vehículo de combustión térmica- ha sido necesario incluir un calentador especial de la pila de células de combustible.
Pero no es el único reto al que se han sometido los ingenieros de la marca surcoreana. El funcionamiento de este sistema "Hyundai Fuel Cell" sólo tiene agua por emisiones, por lo que una vez apagado el NEXO y sometido a estas temperaturas tan extremadamente bajas, la formación de hielo es un hecho más que posible.
La solución ha sido integrar un soplador conectado a la pila de celdas de combustible para eliminar todo el agua que quede en el sistema antes de que se congele. Solventadas estas dos cuestiones, el uso más eficiente posible de una eléctrico alimentado por batería también es un reto a batir.
En el caso del nuevo Kona Eléctrico, se ha montado una bomba de calor que aprovecha todo el excedente de calor generado por el sistema de propulsión para alimentar de energía los sistemas de climatización del interior, por lo que gracias a esta bomba de calor se requiere menor energía de la pila de combustible y se puede aumentar la autonomía disponible que, con una sola carga, asciende hasta 800 kilómetros, la más elevada del mercado en su categoría.
Además, también cuenta con un control inteligente de la entrada de aire, que recicla el aire caliente controlando la cantidad de aire que ingresa y sale del vehículo calentando el habitáculo de forma más eficiente; e, incluso si el conductor es el único ocupante, se puede activar el modo "solo controlador" mediante un botón en el cuadro de instrumentos.
La versión eléctrica del nuevo Kona también cuenta con un sistema de preacondicionamiento pudiendo programar una función de calentamiento o enfriamiento antes de acceder al vehículo y comenzar la marcha cuando el vehículo se encuentra en proceso de recarga conectado a la red eléctrica, no necesitando hacer uso de la batería de 64 kWh de la versión más potente o de la batería de 39,2 kWh de la versión básica, que ofrecen unas autonomías máximas de 482 y 312 kilómetros, respectivamente.