Las marcas de coches aumentan sus ingresos pero descienden las ganancias
Durante el pasado año 2019 las 28 compañías automovilísticas más representativas de la industria automotriz aumentaron de manera notable sus ingresos. Sin embargo, y de manera sorprendente, las ganancias de las principales marcas de coches cayeron. ¿Cómo es esto posible? Analizamos los datos clave de un retroceso de las ganancias operacionales mucho antes de que entrara en escena la pandemia del coronavirus.
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Publicado: 14/04/2020 13:00
Las dificultades en la industria automotriz se iniciaron mucho antes de la pandemia generada por el coronavirus COVID-19. A lo largo del año pasado la economía global sufrió por diversos factores teniendo un impacto en los resultados financieros de los fabricantes de automóviles. Así lo indican los datos recolectados de las 28 compañías más representativas de la industria durante 2019, cuando las ganancias operacionales cayeron un 11% totalizando 86,4 billones de euros.
La caída contrasta con el aumento de los ingresos (+1%) que totalizaron 186 trillones de euros. La volatilidad del mercado y las presiones sobre la industria afectaron la capacidad de los fabricantes de proteger sus ingresos y ganancias.
La consecuencia obvia de esta situación (más ingresos y menos ganancias) se refleja en el margen operacional, que cayó a 4,6% en 2019 desde 5,2% un año antes. El menor margen se explica también por problemas en China, Estados Unidos y Europa. En el caso chino, cuyas ventas de coches representan el 29% del total global, la caída se debe a nuevas regulaciones, presiones económicas y menores ayudas al coche eléctrico. En Estados Unidos y Europa, los números rojos suceden varios años de fuerte crecimiento.
En 2019 ha habido un nuevo primer lugar en cuanto a ingresos. El Grupo Volkswagen ha superado Toyota con 252,6 billones de euros contra 250,8 del fabricante asiático. En ambos casos, los ingresos crecieron respecto a 2018 gracias a mayores volúmenes de venta. Sin embargo, Toyota encabezó el ranking por cantidad de ganancias operacionales, con 21,2 billones de euros, o 1.976 euros por unidad vendida.
Pero de todos los casos, el de Ferrari es sin duda el más llamativo. El fabricante de Maranello, que vendió 10.131 coches en todo el mundo, registró el margen operacional más alto entre todos los fabricantes. En total, Ferrari ganó un poco más de 86.000 euros por coche vendido, equivalente a un 23,2% de rentabilidad operacional. «Il Cavallino» logra mitigar la crisis gracias a la adopción de nuevas tecnologías, su capacidad de adaptarse y a su extraordinario departamento de marketing. Pero incluso mejor aún ha sido su capacidad de hacer dinero sin la ayuda de SUVs, el segmento más rentable del momento.
De hecho, la posición rentable de Ferrari es única en la industria. Según los cálculos, el grupo automovilístico más cercano en rentabilidad por unidad vendida ha sido BMW. Sin embargo, este bien atrás de Ferrari, pues los alemanes deben vender 30 unidades para igualar la ganancia obtenida por Ferrari por una unidad despachada. En otras palabras, la rentabilidad operacional por unidad de un Ferrari es 30 veces superior a la de un BMW. La diferencia es aún mayor comparado con el resto de los fabricantes.
Vale la pena también detenerse en Tesla. La llegada del Model 3 activó la producción y las ventas globales. Sin embargo, en vista de que es un coche más económico, los ingresos no han crecido en la misma proporción. Tesla está aún en fase de expansión y por lo tanto sigue consumiendo mucho efectivo para financiar su crecimiento. Lo anterior explica la perdida operacional del año, equivalente a 61,6 millones de euros, que resulta mucho menor a los 346,4 millones de perdida vista en 2018.