IndyCarUn brillante Alex Palou se lleva una de las poles para el millonario Desafío de Thermal

Las características únicas del Desafío de Thermal, tanto en su peculiar formato como en las dificultades que ha ofrecido el circuito durante dos días de test, culminaban en la madrugada española del sábado al domingo con una sesión de clasificación 'exprés' sin margen para el error. Apenas ocho minutos por grupo (cuatro menos de lo inicialmente previsto), con push-to-pass limitado y un único juego de gomas, lo que se traducía en una única gran tentativa. Nada de eso pareció afectar a Álex Palou, que respaldó su gran velocidad de los entrenamientos.

El piloto español, que acabó sexto hace dos semanas en la primera prueba de la temporada en St. Petersburg, ha obtenido la pole position para la segunda de las mangas clasificatorias a 10 vueltas. Estas determinarán la composición de la parrilla de 12 coches que peleará en la carrera final de 20 vueltas por un suculento premio económico, lo único en juego en esta prueba no puntuable. Palou supo sacar partido de una situación complicada, con una bandera roja de por medio que amenazó con complicarle la vida el sábado.

A diferencia del primer grupo, en el segundo se levantaron fuertes rachas de viento e incluso pequeñas tormentas de arena, algo que ya había ocurrido un par de veces durante el día en el desértico entorno de Thermal durante las sesiones de test. Palou llegaba a esta clasificación con mucha confianza, tras haber liderado las dos tandas del viernes y ser segundo en la matutina del sábado, que le situó al final con el quinto mejor tiempo de esas nueve horas de rodaje.

Cuando el vigente campeón se encontraba a mediados de su intento bueno de clasificación, Marcus Ericsson sufrió un accidente al perder el control en la bacheada curva 9, que ya había dado problemas anteriormente. En ese momento, Palou se encontraba en sexta posición a falta de 1:19 para el final, permitiendo IndyCar un último intento válido a quien lo quisiera, como acostumbra. Pese a mantener las mismas gomas, y quedarle solo 14 de sus 40 segundos de push-to-pass, las condiciones de viento se calmaron durante la bandera roja, y Palou sacó el máximo partido de ello.

Su crono de 1:38.567, de hecho, terminó siendo el más veloz de la clasificación, lo que otorgaría al español la pole en la carrera final si gana su manga. Batió por dos décimas a su compañero Marcus Armstrong y por cuatro a un sólido Graham Rahal, el único que evitó un triplete Ganassi por parte de Linus Lundqvist. Por su parte, Tom Blomqvist parece haber encontrado la competitividad al volante de un IndyCar por primera vez en los test de este finde, y lo ha validado al clasificar quinto en su grupo ante un Pietro Fittipaldi que superó expectativas.

Por contra, la fortuna de la bandera roja salió cruz para McLaren, en especial para Callum Ilott y Pato O'Ward, que durante la bandera roja lideraban la sesión tras haber completado ya su vuelta buena en medio del vendaval arenoso. No salieron al intento final, y quedaron relegados al octavo y noveno puesto, justo detrás de su compañero Alexander Rossi, que apenas sacó partido de la mejora. Colin Braun y Christian Rasmussen se hallaban circunstancialmente entre los cinco primeros durante la interrupción, pero su menor prestación final recogería más adecuadamente su rendimiento real.

Desde Suecia con amor: Rosenqvist sigue en sus trece

'You Give Pole a Bad Name' no es ciertamente el sonido que Rosenqvist evoca en su coche.

Con anterioridad, el primer grupo transcurrió de forma mucho más limpia y fluida, aunque eso no evitó unas cuantas sorpresas en los resultados. Pese a que había pasado algo desapercibido en los test, Felix Rosenqvist ratificó la excelente forma con la que ha arrancado la temporada y se hizo con la pole para la primera manga clasificatoria, a solo 16 milésimas del tiempo que haría después Palou. El sueco, que ya hizo la pole en St. Petersburg, batió por 22 milésimas a Scott McLaughlin, el mejor de un equipo Penske que había sacado las garras en el test.

Christian Lundgaard venía de registrar en la sesión final el mejor tiempo de la semana, asistido por una racha de viento de cola (1:38.219), pero le faltaron 56 milésimas en clasificación para repetir el primer puesto. El danés saldrá cuarto en esta manga, detrás de un Rinus VeeKay que también parece haber empezado el año con buen pie. Josef Newgarden encontró en las horas finales del día el balance que parecía esquivarle, y acabó quinto sobre Will Power y los dos coches de Juncos, aunque Romain Grosjean acabó siete décimas por delante de un Agustín Canapino contento con la posición.

Aquí no faltaron tampoco grandes nombres en puestos traseros. Scott Dixon necesitará ganar tres posiciones para estar en la carrera final del domingo, pero lo tienen un poco más cuesta arriba Colton Herta y Kyle Kirkwood tras varios sustos durante sus vueltas, siendo una posibilidad real que Andretti no tenga ningún coche peleando por el medio millón de dólares. También será una tarea complicada para el debutante Nolan Siegel, que al menos logró superar a otros dos coches y arrancará duodécimo en busca de que los acontecimientos jueguen a su favor.

Las carreras cortas a 10 vueltas (a partir de las 17:35 hora española, en Movistar Deportes 5) prometen estar cargadas de acción en la zona media de ambas parrillas, con el top 6 como objetivo común. Será un reto distinto a de la prueba final (18:55), donde las 20 vueltas pueden hacerse muy cuesta arriba para los neumáticos de la mayoría de pilotos, obligados a aguantar ese único juego. Si a eso le sumamos que las condiciones apuntan de nuevo a una alta incidencia del viento, la tensión estará más que garantizada. Sin puntos que perder, nada impide a nadie jugársela... salvo que la posibilidad de romper el coche pese más que el beneficio económico.

Fotos: IndyCar Media