IndyCar aplaza el GP de St. Petersburg y las cuatro primeras carreras
La categoría ha aplazado todos sus eventos en los meses de marzo y abril. Las medidas de prevención del coronavirus tumban St. Petersburg pese a cerrar las gradas y reducir los días de competición. La temporada no daría comienzo hasta el GP de Indianápolis en mayo, también en peligro.
5 min. lectura
Publicado: 13/03/2020 18:30
A pesar de todos los intentos por mantener lascompeticiones previstas este fin de semana, el bien común y la prevención ante el avance del coronavirus han prevalecido sobre todos los eventos automovilísticos de este fin de semana, siendo los estadounidenses los últimos en caer. Menos de 24 horas después de confirmarse la continuidad del evento a puerta cerrada, IndyCar ha comunicado oficialmente el aplazamiento de todas las carreras que la categoría iba a disputar hasta el mes de abril, incluyendo el Gran Premio de St. Petersburg que debía disputarse este mismo fin de semana.
Esta decisión no solo afecta al Gran Premio de Long Beach del 19 de abril, que ya fue aplazado ayer, si no también al Gran Premio de Alabama, la segunda prueba del calendario en el Barber Motorsports Park (5 de abril), y el IndyCar Challenge de Austin (26 de abril). La jornada de hoy en St. Petersburg ya había quedado vacía para los coches de la categoría principal, limitando el rodaje a las categorías soporte hasta la emisión del anuncio oficial. Todas ellas tampoco seguirán corriendo en St. Petersburg, cuyo evento parece correr serio riesgo de quedar cancelado por completo este año debido a la dificultad para obtener los permisos de construcción en la zona.
«Tras una cuidadosa reflexión, incluyendo la comunicación regular con los promotores de los eventos, las autoridades sanitarias y las administraciones de las respectivas ciudades en relación con el COVID-19, hemos tomado la decisión de cancelar todos los eventos de IndyCar Series hasta abril», reza el comunicado oficial. «Aunque estamos muy decepcionados por retrasar el inicio de la temporada, y echaremos en falta a los increíbles aficionados que nos apoyan cada año en St. Petersburg, Birmingham, Long Beach y Austin, la seguridad de nuestros aficionados, competidores, personal, socios y periodistas será siempre nuestra principal prioridad».
Con todo ello, el inicio de la temporada para la IndyCar queda totalmente opacado en los dos meses en los que se esperan los picos más altos de lo que ya ha sido declarado como una pandemia mundial que ha paralizado por completo el deporte a nivel mundial. En el seno del automovilismo, solo el Rally Guanajuato, la prueba mexicana del Mundial de Rallies, continúa adelante, pero las múltiples cancelaciones invitan a pensar en que serán muy pocas las categorías que tomen la misma decisión de aquí al final de la primavera.
La primera cita del calendario de IndyCar que no se ha visto, de momento, afectada por las medidas de prevención es el Gran Premio de Indianápolis del próximo 9 de mayo, la carrera que da comienzo a las festividades de las 500 millas de Indianápolis, cuyos entrenamientos arrancan inmediatamente después. No obstante, muchas de las previsiones apuntan a que el mes de mayo también podría estar en peligro, y que este y otros eventos no se podrían llevar a cabo sin restricciones significativas de viaje y reunión masiva hasta llegado junio. Con todo, el calendario de IndyCar culmina el 22 de septiembre, por lo que existen numerosas fechas disponibles en octubre y noviembre para reprogramar todo lo que no se dispute esta primavera.
El anuncio de IndyCar llegó solo once minutos después de que NASCAR comunicase la suspensióninmediata de la 500 millas de Atlanta que iba a disputar este fin de semana, así como el evento de la próxima semana en el Homestead-Miami Speedway. En la jornada de ayer, el máximo organismo de la competición de stock cars anunció que ambas citas también iban a disputarse a puerta cerrada, teniendo este finde consigo a la Xfinity Series y la Truck Series, las dos principales categorías soporte de la Cup Series. Solo dos horas antes, se había decidido adelantar la disputa de la carrera principal al sábado, pero ni siquiera eso ha salvado el evento.
Fotos: IndyCar Media