IndyCarColton Herta es el ganador más joven de la historia tras vencer en Austin

La posibilidad estaba ahí, pero nadie terminaba de creérselo del todo. Ni tras su espectacular ritmo en los test de pre-temporada, ni tras su gran velocidad en St. Petersburg, ni tras clasificar en cuarta posición para el IndyCar Classic éste sábado. Nadie terminaba de creerse que un chaval de 18 años compitiendo para uno de los equipos, a priori, más modestos de la categoría podía conseguir la victoria. Hoy, Colton Herta se ha encargado de sacar de su error a todos los incrédulos, haciendo historia por el camino.

A seis días de cumplir 19 años, el hijo del ex piloto Bryan Herta se ha convertido en el ganador más joven de la historia de la IndyCar, superando el récord establecido por otro hijo de ex piloto, Graham Rahal, en el Gran Premio de St. Petersburg en 2008. Y lo hizo tras una carrera en la que la suerte estuvo de su lado, pero el californiano no dejó de buscarla, habiendo rodado siempre en posiciones de podio.

Desde la pole, Will Power fue a la caza del premio de 100.000 dólares manteniendo a raya a Alexander Rossi, mientras Herta rebasaba a Ryan Hunter-Reay camino de la primera curva. Tras un intento de adelantamiento fallido por parte de Rossi en la recta principal, los líderes apenas se atacaron camino de las tempranas primeras paradas. Herta adelantó su detención un giro respecto a los líderes, en la vuelta 13 y consiguió emerger por delante de Rossi, cogiendo brevemente la iniciativa en la presión sobre Power.

Rossi recuperó la segunda posición en la recta trasera en la vuelta 23, y la retuvo tras su parada seis vueltas después, pese a que Herta volvió a adelantarse. Desde entonces, los tres primeros marcaron su propio ritmo, sin que Rossi se acercase a menos de ocho décimas de Power, y con un margen de hasta 20 segundos con un Josef Newgarden que ganó tres puestos en su primera parada a base de un undercut. La carrera parecía destinada a acabar en un duelo cara a cara por el triunfo, hasta la vuelta 44.

Habiéndose iniciado el último periodo de paradas dos vueltas antes, Herta ejecutó su última detención en la vuelta 44, al igual que Newgarden y Hunter-Reay, mientras Power y Rossi tenían pensado parar en la vuelta siguiente. No obstante, en esa misma vuelta, Felix Rosenqvist sufrió un accidente en la entrada a boxes al ser golpeado por James Hinchcliffe cuando peleaban por la undécima posición en la escapatoria de la controvertida curva 19.

El caution posterior, y la regla de los pits cerrados, hizo que los dos líderes perdiesen múltiples posiciones al parar, cediendo el liderato a Herta. Cuando la carrera se relanzó con nueve vueltas por delante, el piloto de Harding no solo evitó cualquier intentona inicial de Newgarden, si no que consiguió abrir un margen de hasta cuatro segundos, vuelta rápida incluída, para hacerse con una cómoda victoria que entra en los libros de historia, en tan solo su tercera carrera en IndyCar.

Tras su victoria en St. Petersburg, Newgarden se conformó con una buena segunda posición, aguantando detrás sin demasiados apuros a un Hunter-Reay que salvó los muebles para el equipo Andretti. La cuarta posición fue a parar a un Graham Rahal que rodó casi toda la carrera al borde del top 10, y que completó el top 4 estadounidense, mientras Sébastien Bourdais y Marco Andretti, que recuperaron numerosas posiciones en su última parada, consiguieron aprovechar el caution final para situarse quinto y sexto cuando habían estado al fondo durante casi todo el día.

Mientras tanto, los dos líderes durante toda la prueba la terminaron totalmente a contrapie. Rossi logró recuperar tres posiciones para terminar noveno, pero Power no pudo siquiera salir de su calle de boxes tras apagarse por completo su monoplaza, pasando de una posible victoria a "terminar" último. A su vez, Ganassi tuvo una carrera para el olvido, con Scott Dixon y Rosenqvist perdiendo mucho terreno y posiciones en sus dos primeros stints. Dixon había conseguido recuperarse hasta el sexto puesto, pero no parar antes del último caution le relegó a la 13ª posición.

Tras Andretti, Takuma Sato se hizo con una peleada séptima posición por delante de un Patricio O'Ward que fue una de las sensaciones de la carrera, firmando adelantamientos espectaculares y llegando a rodar sexto en la última resalida antes de caer a la octava posición final, una mejor que en su primera carrera en Sonoma. Tras Rossi, Jack Harvey cerró el top 10, mantiendo la buena racha del equipo Shank en ese sentido.

Por otro lado, la fortuna también le fue esquiva al equipo Schmidt, en especial a un Marcus Ericsson que, a base de estrategia y buen ritmo, se situó quinto adelantando sus dos primeras paradas, y que también iba a tomar la resalida final en esa posición, pero una infracción de su equipo al sacarle de boxes en el camino de otro coche le costó una sanción por 'unsafe release', terminando finalmente 15º por delante de un Hinchcliffe que se vio involucrado en varios incidentes durante el día, al igual que Zach Veach.

Aunque la carrera fue mayormente un affaire de posición en pista, el caution final volteó finalmente las tornas para una de las grandes historias de la pretemporada, la de Harding Steinbrenner Racing, un equipo que, tras la emoción inicial de la vinculación con los Yankees, parecía en caos total hace apenas un mes. Pero un gran coche (independientemente de la asistencia de Andretti) y un piloto muy motivado han hecho el resto. Austin debuta en la IndyCar con una carrera que quedará para los anales, y que quizá vea nacer la leyenda de otro gran piloto de segunda generación.

Resultados del IndyCar Classic en Austin (60 vueltas)

Clasificación de la IndyCar 2019 (carrera 2 de 17)

(R): Novato*: Temporada parcial

Fotos: IndyCar Media