IndyCarLas opciones matemáticas de los seis candidatos al título en Sonoma

La temporada 2017 de IndyCar, una de las más intensas y determinantes de las últimas décadas, toca a su fin este fin de semana en el Sonoma Raceway, que acoge la prueba final por tercera temporada consecutiva. En las dos anteriores, decidió el campeón, al igual que en todas los finales de temporada desde 2007, y este año no será una excepción, ya que, por cuarto año consecutivo, la ronda final tendrá una doble puntuación que permite que hasta seis pilotos hayan conservado opciones de hacerse con el título hasta el final.

Este aspecto, no obstante, no ha sido decisivo para igualar la pelea por el campeonato, ya que, con puntuación normal, el duelo habría sido entre cuatro, y las opciones de los otros dos son bastante marginales, pero sí ha permitido que las posibilidades de los dos outsiders que ocupan la tercera y cuarta posición sean algo más elevadas. En concreto, seis son los pilotos que cuentan con opciones matemáticas, mayores o menores dependiendo del caso: Josef Newgarden (561 puntos), Scott Dixon (557), Hélio Castroneves (538), Simon Pagenaud (526), Will Power (492) y Alexander Rossi (476).

Además de la puntuación estándar multiplicada por dos (100 - 80 - 70 - 64 - 60 - 56 - 52 - 48 - 44 - 40 - 38 - 36 - 34 - 32 - 30 - 28 - 26 - 24 - 22 - 20 - 18 - 16), Newgarden ya ha obtenido un punto por llevarse la pole position. En carrera, se otorgará también un punto a todo piloto que lidere, al menos, una vuelta, y aquel que lidere el mayor número de vueltas recibirá dos puntos adicionales. Con todo, las combinaciones de los puestos necesarios son excesivamente numerosas con seis candidatos, en especial si bajamos del top 10, así que se reflejarán sólo algunas de las que involucran bonus.

JOSEF NEWGARDEN (560 puntos)

La nueva joya de Penske ha conseguido llegar a la última carrera en una posición envidiable, la de líder del campeonato, merced a una fantástica temporada en la que ha obtenido cuatro victorias (Barber, Toronto, Mid-Ohio y Gateway) y ocho podios. No obstante, su error al golpear el guardarrail en la salida de boxes en Watkins Glen ha reducido una ventaja de 31 puntos a sólo 3, por lo que el duelo de posiciones con Scott Dixon, su más inmediato perseguidor, será directo. Como anécdota, Newgarden podría ser el primer piloto en ganar un campeonato sin sumar un punto de pole desde Dan Wheldon en 2005 (Ryan Hunter-Reay ganó un punto de pole en 2012 pese a ser sancionado en parrilla a posteriori).

Newgarden será campeón si...

(en negrita: casos en los que sus rivales cumplieron con las condiciones este año). (MV: bonus de más vueltas lideradas)

Como se puede apreciar, Newgarden cuenta con un amplio abanico de posibilidades para ser campeón sin depender de los puntos de bonus. Por lo pronto, ganar le otorgaría el título inequívocamente, y terminar por delante de Dixon permitirá batir al neozelandés en cualquier caso. Le podría valer terminar justo por detrás, si los bonus acompañan. Los precedentes de la temporada indican que el top 9 será indispensable para el título y, sobre todo, mantener a raya a sus dos compañeros, Castroneves y Pagenaud, al que un podio dejaría fuera de combate. Sólo un percance obligaría a buscar una serie de carambolas que quizá no solventen el daño ya hecho. Por fortuna para él, sus resultados le permitirían ganar todo tipo de empates, incluído con Will Power si se diese el caso.

SCOTT DIXON (557 puntos)

El veterano piloto neozelandés, de 37 años, siempre está ahí a la hora de la verdad. La forma de obtener sus dos últimos campeonatos, en 2013 y 2015, demuestran su enorme fortaleza en los tramos finales de temporada y, sobre todo, su capacidad para derrocar a toda una Penske con sus armas habituales: una consistencia extraordinaria, un ritmo demoledor en circuito, un ahorro de gasolina inigualado en la parrilla y el don de la oportunidad. Este año sólo ha logrado un triunfo en Road America, pero su buen inicio de año y sus cinco segundos puestos han compensado el brutal accidente en la Indy 500, su único punto negro del año. A sólo tres puntos está el convertirse en el segundo piloto de la historia, tras el heptacampeón A. J. Foyt, en ganar cinco títulos de IndyCar.

Dixon será campeón si...

(en negrita: casos en los que sus rivales cumplieron con las condiciones este año) (MV: bonus de más vueltas lideradas)

Al igual que en el caso de Newgarden, todos los escenarios que le dan el título terminando entre los 9 primeros han ocurrido esta temporada, y depende de sí mismo para ser campeón, pero sus opciones son algo más complejas si no termina entre los dos primeros, ya que obligaría a Dixon a tener a Newgarden al menos dos puestos por detrás. A partir del octavo puesto, la diferencia de posiciones con Newgarden debería ser incluso mayor, y los demás Penske pinchar, algo posible pero bastante complicado. Eso sí, su top 10 eliminaría las pocas opciones de Will Power.

HÉLIO CASTRONEVES (538 puntos)

El curtido piloto brasileño, de 42 años, llega por octava vez en su carrera a la última ronda con opciones de ganar un título que le ha sido esquivo hasta la fecha. Tras una temporada en los que los rumores de su retirada forzosa de la categoría han sido muy numerosos, el triple vencedor de las 500 millas de Indianápolis, al que se daba ya por deshauciado para estas cuitas, se ha empeñado en contradecir a sus críticos con una de las temporadas más sólidas de su carrera, logrando en Iowa su primera victoria en tres años. Sólo ha subido al podio tres veces, pero su segundo puesto en Indy y sus 8 top 5 le han mantenido en la pelea. Ahora que los rumores apuntan a que Penske podría mantenerle en el equipo después de todo, Hélio quiere retrasar su marcha lo máximo posible, y gozará para ello de su mejor oportunidad desde 2008.

Castroneves será campeón si...

(en negrita: casos en los que sus rivales cumplieron con las condiciones este año, a excepción de la Indy 500) (MV: bonus de más vueltas lideradas)

Una hecatombe de los dos favoritos como la de la Indy 500 validaría hasta un séptimo puesto de Castroneves, pero el resto de resultados del año indica que un podio será casi condición sine qua non para aspirar a la machada. Por lo pronto, el brasileño tiene una mínima opción de depender de sí mismo sin preocuparse de otros resultados, que pasaría por ganar la carrera desde la pole y liderando el mayor número de vueltas. La última vez que hizo algo así en circuito fue en este mismo trazado, pero hace ya 9 años. ¿Su última victoria de este estilo? En el óvalo de Motegi, en 2010. Con todo, una victoria simple le haría campeón automáticamente si alguien se colase entre él y Newgarden o Dixon. Un segundo puesto obligaría a que el vencedor no fuese Pagenaud, y a que ninguno de los dos favoritos terminase arriba, una situación complicada en condiciones normales.

SIMON PAGENAUD (526 puntos)

El vigente campeón ha defendido su corona esta temporada con buen tino y la suficiente consistencia para dejar claro que su segunda temporada en Penske era más representativa que la primera. El piloto francés ha exhibido una excelente solidez en las posiciones de cabeza, acompañando su triunfo en Phoenix con doce top 5, y sólo la enorme cantidad de puntos perdida en una Indy 500 en la que volvió a pasar desapercibido le impide estar más arriba. Este fin de semana se cumple un año de su última victoria en circuito, aquella que le proclamó campeón, y buscará repetir para apurar sus opciones, sabedor de que ser la tercera espada de Penske podría obligarle a ceder en busca del bien común.

Pagenaud será campeón si...

(en negrita: casos en los que sus rivales cumplieron con las condiciones este año) (MV: bonus de más vueltas lideradas)

La doble puntuación abre a Pagenaud una posibilidad de triunfo razonable si consigue ganar la carrera, pero dependerá de que Newgarden y Dixon terminen fuera del podio. Cualquier otro resultado comprometería en exceso la situación, e introduciría en las cuentas a un Castroneves que también debería terminar fuera del podio en una situación así. De hecho, el escenario que le haría campeón con un tercer puesto no se ha dado en todo el año. El francés, por tanto, sólo tiene que ir a por la victoria y esperar acontecimientos.

WILL POWER (492 puntos)

En una curiosa paradoja, el piloto australiano va camino de la que podría ser su peor temporada en la clasificación general desde su llegada a Penske y, sin embargo, la doble puntuación le permite conservar pequeñas opciones de cara a un segundo título en Sonoma. Ciertamente, los puntos reflejan el tremendo bache con el que empezó la temporada, así como sus inoportunos abandonos en la Indy 500 y Gateway, una irregularidad que ha camuflado sus buenos destellos. Por sorpresa, el antaño dominador de los circuitos y manojo de nervios en óvalos ha encontrado su nicho este año en los giros a izquierda, donde ha obtenido dos de sus tres triunfos. Un cuarto sería imprescindible para agotar sus opciones de cara a la diosa Fortuna, así que, en este caso, sí que haremos cábalas con los puntos de bonus.

Power será campeón si gana y...

(MV: bonus de más vueltas lideradas / V: bonus por vuelta liderada)

Las opciones de Power, básicamente, pasan por una actuación dominante, que tanto Dixon como Newgarden no terminen en el top 10, y que los otros dos Penske no consigan estar en cabeza. Sin los puntos por liderar más vueltas, Newgarden y Dixon deberían terminar aún más atrás. La combinación de todas ellas sería la tormenta perfecta que le permitiría recortar 68 puntos de desventaja y cuatro posiciones en la última carrera. Bastante improbable, pero no absolutamente imposible.

ALEXANDER ROSSI (476 puntos)

El hecho de que el piloto californiano no haya figurado en absoluto en las promociones de la categoría esta semana hablan a las claras de que su presencia en este grupo de candidatos es, básicamente, pura matemática. Para el piloto de Andretti, ese simple hecho ya es un premio a una fantástica segunda temporada en la categoría, en la que la progresión ha sido evidente: victoria en Watkins Glen, cuatro podios y diez top 10, cinco de ellos en las últimas cinco carreras, siendo el único piloto de su equipo en ser una amenaza constante este año. Recién renovado y con el triunfo del Glen fresco, buscará un triunfo que permita cerrar el año por todo lo alto. ¿El título? Mejor pensar en ello para 2018.

Rossi será campeón si gana liderando más vueltas y...

(V: bonus por vuelta liderada)

Ésta es, en definitiva, la situación general. Obviamente, todos los focos estarán puestos en los dos hombres de cabeza, que se marcarán de cerca durante todo el evento, pero el resto de contendientes de Penske estará al acecho por si alguno flaquea, en una pelea que se iniciará con el preciado punto por la pole position del sábado. La suerte está echada, y el Gran Premio de Sonoma dictará sentencia.

Fotos: IndyCar Media