Carpenter anuncia a Alexander Rossi y recibe una inversión multimillonaria
El equipo del piloto Ed Carpenter incorpora al ex-ganador de la Indy 500, que rechazó en verano renovar con McLaren, y amplía el programa de Christian Rasmussen a toda la temporada, a costa de prescindir de Rinus VeeKay. La llegada de un nuevo co-propietario aportará estabilidad financiera al equipo.
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Publicado: 25/09/2024 20:30
Tras varios años de navegar por la zona media de la parrilla de IndyCar con resultados dispares, Ed Carpenter Racing busca volver a la zona noble de la parrilla de IndyCar a partir de 2025. El equipo con sede en Speedway, Indiana, creado en noviembre de 2011 sobre las cenizas físicas y organizativas de otras dos formaciones (Walker Racing y Vision Racing), ha efectuado dos importantísimos anuncios a nivel deportivo y económico que aseguran su futuro a medio plazo. Y en ese futuro estará Alexander Rossi como líder del proyecto.
En el día de su 33 cumpleaños, el piloto estadounidense ha sido anunciado como nuevo integrante del equipo en el coche #20, poniendo fin a un trimestre entero de incertidumbre en torno al ganador de las 500 millas de Indianápolis de 2016. A su vez, Carpenter ha anunciado también que Christian Rasmussen continuará por segundo año, esta vez cambiándose al coche #21 y disputando un programa completo y sin compartir el coche en óvalos con Ed Carpenter. A sus 44 años, el 'jefazo' disputará por 22ª vez la Indy 500 con un tercer coche, pero esa será en principio su única aparición del año, y el sistema de chárters hace muy poco plausible que vaya a cambiar de opinión.
Este anuncio vino precedido, dos días antes, por la sorprendente confirmación de que Rinus VeeKay no seguirá en Carpenter, el equipo que le dio la alternativa en 2020, siendo efectivamente relevado por Rossi pese a que este no se subirá al #21 que llevaba su predecesor. El piloto neerlandés, que no anticipaba tener que cambiar de aires, logró la última victoria de Carpenter en el Gran Premio de Indianápolis de 2021 y su último podio, el cuarto de su trayectoria como piloto, en el Gran Premio de Alabama de 2022, donde logró su segunda pole. Sin embargo, su posición final en la general se ha mantenido en este lustro entre la 12ª y la 14ª plaza, terminando 13º este año con un quinto puesto en Iowa como mejor resultado, y cinco de sus siete top 10 en pruebas ovales.
El piloto que le sustituye, Rossi, ha atravesado una situación similar a otra escala, logrando también en el rutero de Indianápolis su única victoria de estos últimos cinco años, en su caso en el Brickyard Grand Prix de 2022 cuando aún pilotaba para Andretti Autosport. En sus dos temporadas con McLaren, Rossi se ha limitado a ser un correcto segundo espada, con dos terceros puestos en el Indy GP (2023) y Laguna Seca (2024) como mejores lugares, y sus puestos finales en la general han sido el 9º y el 10º, los mismos que los tres años anteriores. A principios de julio, se anunció que Rossi no continuaría en McLaren tras rechazar una oferta de renovación por un año que el piloto y su entorno consideraron como 'insuficiente', confirmandose poco después que Christian Lundgaard ocuparía su lugar.
A nadie escapa que el buen rendimiento de los coches de Carpenter en la Indy 500, donde VeeKay ha sido un habitual de los puestos delanteros en parrilla, ha figurado de forma positiva en la decisión, siendo el gran anhelo del americano obtener una segunda victoria en la prueba tras quedarse cerca en numerosas ocasiones. Si bien los emolumentos del subcampeón de 2018 no estarán al mismo nivel que en la formación papaya, la firma de un contrato multianual, el estatus de piloto numero 1 y la llegada de nuevo capital al equipo Carpenter ponen la guinda al pastel, por delante de otras opciones como Rahal Letterman Lanigan Racing o Juncos Racing.
Ese nuevo capital, anunciado en la jornada de ayer, llega a través de Ted Gelov, el nuevo co-propietario del equipo, que ha insuflado una inversión de 40 millones de dólares a través de Heartland Food Products Group. Con ello, Carpenter se aleja de las financiaciones 'sospechosas' y criptoinversiones de los últimos años, cuya falta de pagos en los últimos 18 meses obligó este año a los coches de Carpenter a competir sin sponsors en una docena de pruebas. Esta compañía con sede en Indianápolis manufactura marcas conocidas de consumo en el sector de los edulcorantes y la cafetería, las cuales figurarán como patrocinadores, y cuenta con beneficios superiores a los 500 millones de dólares anuales.
Esta inversión hace que Carpenter retenga su libertad de elección de pilotos, por lo que no ha dejado de resultar chocante la decisión de mantener a Rasmussen en lugar del más contrastado VeeKay. El danés, no obstante, se ha ganado la confianza de su jefe pese a un complicadísimo año debut, lleno de infortunios y resultados poco decorosos. Su noveno lugar en las 200 millas de Mid-Ohio fue su único top 10, en un año que solo abarcaba circuitos y la Indy 500 en primera instancia. Su buen desempeño oval, demostrado en su año de campeón de Indy NXT y en una buena Indy 500 en la que acabó 12º, fueron claves para que Carpenter se bajara a sí mismo del coche para los tres óvalos finales, donde Rasmussen aseguró la obtención del millón de dólares del Leaders Circle con más efectividad que espectacularidad.
En sus cinco primeros años de existencia, contando el 2015 en el que compitieron como CFH Racing tras la breve fusión con Sarah Fisher Racing, el equipo Carpenter obtuvo siete victorias y 15 podios, llegando incluso a pelear el campeonato en años consecutivos con Josef Newgarden como principal estandarte. Desde su marcha a Penske para 2017, ningún piloto de Carpenter ha acabado en el top 10 de la general, obteniendo solo nueve podios y la mencionada victoria de VeeKay en ocho temporadas. Las fortunas del equipo no cambiarán de la noche a la mañana, pero los cimientos quizá luzcan ahora más sólidos de cara al futuro para intentar liderar la zona media, en especial con los vaivenes que atraviesa Rahal.
Fotos: IndyCar Media