DragonSpeed, otro equipo de resistencia interesado en IndyCar

¿Estamos ante el inicio de una nueva tendencia en IndyCar? El campeonato de monoplazas estadounidenses, que cada vez atrae el interés de más y más equipos, ha visto como Scuderia Corsa hacía su debut participando en las 500 millas de Indianápolis, con la firme intención de competir a tiempo completo en 2020, en el mismo año en el que Meyer Shank Racing, otro equipo del campeonato IMSA, disputa un calendario parcial de seis carreras Ahora, otro equipo de resistencia americano, DragonSpeed, ha manifestado su pretensión de competir en IndyCar a partir de la temporada 2019.

El ex piloto Elton Julian, que compitió en la Formula 3000 y en resistencia antes de colgar el casco, fundó DragonSpeed en 2007, y el equipo ha progresado hasta ser una de las estructuras más reconocidas a nivel de prototipos, ganando la European Le Mans Series (ELMS) el año pasado, categoría que compagina esta temporada con un doble programa LMP1-LMP2 en el Mundial de Resistencia (WEC). Con el apoyo sólido del grupo que posee el equipo, Julian pone ahora el punto de mira en IndyCar.

Según ha afirmado Julian a RACER, DragonSpeed evalúa debutar con un programa parcial en 2019, en el que la Indy 500, y los Grandes Premios de St. Petersburg, Long Beach, Indianápolis Portland y Sonoma estarían entre las prioridades. "Tenemos un compromiso hasta junio del año próximo en el WEC y la ELMS, pero entonces el WEC pasará a ser un campeonato de invierno, así que sería fácil hacer ambos en adelante", asegura Julian. "Quiero seguir en resistencia, pero lo que realmente quiero es que seamos competitivos en IndyCar. El mayor interés viene por el propio campeonato, y todo ese reconocimiento se debe a lo que han conseguido. Lo considero un paso adelante respecto a LMP1.

Esto, sumado al hecho de que el equipo cuenta con dos sedes operativas en Delray Beach (Florida) y Aix-en-Provence (Francia), hace que Julian se muestre plenamente convencido de que su equipo tiene los recursos y el potencial para afrontar todos los frentes: "Es el lugar más realista para nosotros, porque podemos tomar esa decisión ahora y por nuestra cuenta. Competimos en un campeonato mundial, estamos listos para volar a donde seay correr. Podemos aprender rápido, aplicar lo que sabemos y, con suerte, ofrecer un par de actuaciones impresionantes el año que viene. El próximo año sería para demostrar la habilidad del equipo, y después hacerlo todo en 2020".

Julian afirma que su equipo tendrá la potestad para elegir piloto, y su primera opción es el británico Ben Hanley, de 33 años, que compite tanto en LMP1 (WEC) como en LMP2 (ELMS) con el equipo. En monoplazas, Hanley fue subcampeón de la Formula Renault 3.5 en 2007, antes de que un breve y aciago paso por la GP2 le hiciese dedicarse casi en exclusiva al karting entre 2009 y 2015, siendo campeón europeo y subcampeón mundial en la clase KF. Su última experiencia competitiva en monoplazas fue en la última ronda de la Superleague Formula en 2010 en el Circuito de Navarra, hace casi ocho años.

Los principales escollos, como todo equipo aspirante a entrar en la IndyCar, vendrán de las negociaciones para conseguir un motor de Chevrolet o de Honda (algo que se irá compicando con los años si un tercer motorista no ingresa en la categoría), y ponderar la opción de una asociación técnica, algo en lo que DragonSpeed lleva trabajando un mes. "Ya he empezado el proceso, y son las discusiones más importantes que hay que tener. Una vez que tengamos un alquiler de motor, el resto será posible para nosotros". ¿Será este el inicio de una tendencia similar a la de los equipos y pilotos de resistencia que entraron en la CART en los 80? Solo el tiempo lo dirá.

Fuente: RACERFotos: World Endurance Championship