IndyCarPole sorpresa de Linus Lundqvist sobre mojado en Road America; Palou saldrá séptimo

En sus seis primeras clasificaciones oficiales como piloto de Chip Ganassi Racing, el mejor resultado de Linus Lundqvist había sido un 17º lugar en Long Beach. Solo tenía como tabla de salvación en este aspecto el séptimo puesto en la qualy del Desafío de Thermal, prueba no puntuable. A pesar del podio conseguido en Barber, el déficit clasificatorio estaba siendo poco ideal para el piloto que cubre la salida de Marcus Ericsson, y que en sus tres carreras de 2023 con Meyer Shank Racing clasificó entre los 12 primeros. Las tornas han cambiado por completo en Road America, donde la lluvia y un día de gran inspiración le han llevado directo a su primera pole en IndyCar.

El piloto sueco de 25 años iniciará su décima carrera en la categoría desde un lugar diez puestos mejor que cualquier otro anterior, siendo el sexto competidor distinto en conseguir una pole en las siete citas disputadas hasta el momento, y el primer novato en conseguirlo desde Romain Grosjean en 2021. Para ello, Lundqvist tuvo que navegar, de forma figurada y casi literal, un día muy complicado en las proximidades de Elkhart Lake, Wisconsin. La lluvia arreció durante los segundos libres y dejó una pista claramente mojada durante la primera ronda y el Fast 12, pero cesó lo suficientemente pronto para que se generara un carril seco sobre el que montar gomas de seco en el Fast 6.

Hasta él había llegado Lundqvist tras pasar sexto en su grupo de la primera ronda y sorprender en el Fast 12 con una vuelta de quinto puesto que dejó en fuera de juego a todo un Álex Palou. Pese a su reticencia inicial para montar blandos, y tras marcar el tercer mejor tiempo en su primera tentativa, una excelente vuelta final con un registro de 1:45.151 le elevó a los altares de la pole, curiosamente en el único circuito en el que compitió más de una vez en Indy NXT sin subir al podio (tres en total). Con ello, se convierte en el tercer piloto sueco de la historia en conseguir una pole en IndyCar tras Kenny Bräck (7) y Felix Rosenqvist (6), algo que nunca han logrado los ex-F1 Stefan Johansson y el mismo Ericsson.

Su vuelta tuvo como réplica más cercana la de Colton Herta, que venía intratable con el mejor tiempo de las dos rondas previas, pero al que le terminó faltando una décima. Justo mientras cruzaba la línea de cronometraje, Josef Newgarden sufrió un accidente a gran velocidad en el Kink, la curva más rápida del trazado, cuando sus parciales le situaban a solo una milésima del tiempo de Lundqvist. El doble ganador de las 500 millas de Indianápolis perdió el control del Penske #2 al tocar el piano exterior antes de iniciar el giro, y su coche trompeó hasta impactar de forma lateral con las barreras SAFER situadas en la salida de la curva.

Por fortuna para Newgarden, el impacto no reportó ningún percance para su salud, pero sí para su maltrecho vehículo, teniendo que recurrir para mañana a un coche reserva y a un nuevo motor por precaución. Fue la culminación de un horrendo Fast 6 para Penske, ya que Will Power también se quedó sin tiempo por causar una bandera roja, en su caso trompeando en una curva Canada que aún estaba demasiado húmeda para ir demasiado rápido. El australiano, eso sí, saldrá delante del estadounidense por tener una mejor vuelta en el Fast 12.

La clasificación también deparó el mejor puesto de salida, tercero, para un Marcus Armstrong en racha tras su primer podio la semana pasada en Detroit. Se quedó incluso con ganas de más, ya que venía bajando dos décimas el tiempo de Lundqvist en el primer sector cuando se produjo el accidente de Newgarden. El que no venía mejorando era Kyle Kirkwood, que iba justo por delante y cuya primera vuelta no fue tan positiva, pero que saldrá cuarto. Hay que bajar tres puestos más para localizar a Álex Palou, que se las prometía felices tras liderar los libres del viernes y tener el segundo mejor tiempo de la primera ronda, pero que no pudo pasar del séptimo puesto.

Al piloto español, que este año ya se ha quedado fuera de la pelea por la pole en cuatro ocasiones y que fue protagonista de dos banderas rojas por la mañana, no le sirvió un último intento en el que tuvo un par de correcciones demasiado dañinas para sus opciones, mientras sus dos compañeros menos experimentados sí conseguían pasar de ronda. Lo positivo para Palou desde la perspectiva del campeonato es que no le fue mejor a Scott Dixon, que le arrebató el liderato con su segunda victoria del año en Detroit, y que en esta ocasión deberá arrancar décimo. Aún con todo, los años han enseñado a todo el mundo que la posición de salida de Dixon tiene una importancia nula de cara a su desempeño en carrera.

Entre medias de ambos clasificaron un Scott McLaughlin extasiado por poder pilotar al fin un IndyCar como si de un coche de Supercars se tratase, y Alexander Rossi, el mejor McLaren en noveno lugar. Tanto él como su compañero Pato O'Ward, undécimo al final, le habían sacado más partido al grupo de la primera ronda cuyo liderato coparon. Aquí dio otra inesperada sorpresa Kyffin Simpson, que se coló en su último intento para dejar fuera a Christian Lundgaard. Con ello, el contingente de cinco coches de Ganassi al completo accedió a un Fast 12 donde solo había pilotos de los equipos del Big 4: los dos únicos pilotos de estos equipos que se quedaron sin silla cuando la música se detuvo fueron Ericsson (15º) y Théo Pourchaire (18º).

Lundgaard y Grosjean encabezan al 'resto' desde la séptima fila, tras una primera ronda muy cautelosa donde los únicos errores graves los cometieron los pilotos de Meyer Shank Racing con dos grandes pasadas de frenada de Rosenqvist y de Hélio Castroneves. El brasileño se quedó tirado al intentar dar la vuelta y se vio abocado al último puesto de parrilla, en la que podría ser la última carrera de circuito en su ilustre trayectoria de 394 eventos. Por su parte, Nolan Siegel, lanzado al vacío por Juncos para cubrir la ausencia de última hora de Agustín Canapino, hizo una labor profesional y clasificó 21º para su segunda carrera en la categoría. Mañana, la lluvia ya no dará más quebraderos de cabeza: sol de justicia y 55 vueltas del majestuoso Road America.

Fotos: IndyCar Media