IndyCarTakuma Sato sorprende en Texas con su segunda pole del año

El titular habla de "sorpresa", pero realmente la sorpresa empieza a ser relativa con Takuma Sato en términos generales. En su décima temporada en IndyCar, el piloto japonés está firmando el mejor inicio de año de su carrera deportiva, con una victoria en Barber desde la pole y dos podios en Indianápolis y Detroit que le ubican en la quinta posición de la general. En los dos entrenamientos libres que se habían disputado en el óvalo de Texas, Sato terminó segundo, pero casi todos esperaban la aparición estelar de Penske en clasificación. No obstante, el nipón demostró estar encima de todo esto, y consiguió su segunda pole de la temporada, la novena de su carrera en IndyCar, a lo grande.

Siendo el quinto por la cola en salir a clasificar, Sato fue el único piloto que consiguió completar sus dos vueltas por encima de las 220 millas por hora de promedio, culminando con una media final de 220.250 mph. Entre sus rivales, solo otros dos pilotos lograron superar en su primer giro las 220 mph, pero su menor consistencia respecto a Sato resultó decisiva. En particular, para un Sébastien Bourdais que firmó por muy poco la mejor vuelta del día (220.443 mph), pero al que un segundo giro menos productivo le dejó en una nada desdeñable tercera posición.

Entre medias de ambos se situó el tres veces ganador en Texas, Scott Dixon, el que más cerca estuvo en términos generales de Sato, culminando sus dos vueltas a apenas 19 milésimas del japonés. Su situación fue bastante más provechosa que la del equipo Penske, que a la hora de la verdad se quedó muy corto y no estuvo en la pelea por la pole pese a tener las mejores posiciones de salida. Su hombre más fuerte en teoría, Will Power, solo pudo ser 15º tras verse obligado a levantar en su primera vuelta, el vigente ganador de la Indy 500 Simon Pagenaud terminó quinto, y el líder Josef Newgarden, último en salir, clasificó séptimo.

El equipo Andretti tampoco pudo presumir en demasía, a excepción de un Ryan Hunter-Reay que cumplió al clasificar cuarto. Alexander Rossi, otro de los grandes candidatos a la pole, acabó justo fuera del top 10 en undécimo lugar, con Zach Veach justo detrás, mientras que el desastre fue absoluto para un Marco Andretti que convirtió una posible sexta posición en parrilla en una penúltima tras salvar por poco un accidente en su segunda vuelta. Del mismo modo, Carpenter tampoco fue una amenaza seria para la pole, con Spencer Pigot en sexto lugar y Ed Carpenter en una decepcionante 13ª posición.

Graham Rahal terminó lejos de su compañero Sato, y su novena posición le dejó a apenas dos milésimas de la octava posición de James Hinchcliffe, pero por delante de un Colton Herta que estuvo algo por debajo de las expectativas, teniendo en cuenta la fortaleza (dos primeras filas) de los motores Honda. Entre el resto de novatos, Marcus Ericsson sacó más partido que nadie al clasificar 14º, dos puestos por delante de un Felix Rosenqvist que progresa lentamente, y que sacó otras dos posiciones al rookie del año en la Indy 500, Santino Ferrucci.

Entre los equipos más modestos, Charlie Kimball no pudo llevar a Carlin más allá del 17º puesto, batiendo a Ferrucci y a su nuevo compañero Conor Daly. Con todo, su actuación fue más decente que la del equipo local, A.J. Foyt, que sigue sin tocar fondo. Matheus Leist apenas pasó de las 215 mph de promedio, y Tony Kanaan, considerado aún una amenaza en óvalos, no pudo siquiera clasificar al golpear el muro en la salida de la curva 2 durante su primera vuelta.

Fotos: IndyCar Media