El informe TÜV 2022 aboga por incluir los ADAS en la inspección técnica alemana

Los asistentes de conducción ya son una norma entre los fabricantes, muchos de ellos ya obligatorios en todos los modelos nuevos y otros que seguirán en los próximos meses, según el mandato de la Unión Europea, dada su demostrada eficacia a la hora de evitar accidentes de tráfico. Incluso, ya son objeto de ensayo en las pruebas de Euro NCAP.

Sin embargo, el reciente estudio realizado por el TÜV -una de las más importantes certificadoras de calidad de Europa en Alemania, y una de las referencias para los fabricantes y proveedores, incluida también la Unión Europea- ha puesto de relevancia la especial atención al perfecto mantenimiento y funcionamiento de estos sistemas. Las ayudas a la conducción se valen de la información proporcionada por cámaras y potentes sensores colocados en el perímetro exterior, por lo que se entiende que el funcionamiento debe ser seguro durante toda la vida útil de los vehículos.

La revisión de los asistentes de conducción es primordial para garantizar la seguridad vial

En este sentido, cabe recordar que, a partir de julio de 2022, el detector de fatiga y la caja negra de grabación de datos serán obligatorios en todos los modelos nuevos. El informe hace referencia especialmente a tres: el asistente de mantenimiento de carril, el de atascos de tráfico y el de frenado de emergencia en la generación de coches actual. Pero mucho más especialmente en la última hornada de modelos nuevos equipados con actualizaciones por aire, que pueden ser objeto de un ataque y desconectar los sistemas de asistencia.

Joachim Bühler, Director Gerente de la Asociación TÜV, ha señalado al respecto de la presentación del informe que «En estos días, los automóviles modernos reciben regularmente actualizaciones que pueden influir en factores críticos para la seguridad, como el comportamiento de conducción», solicitando al gobierno federal una revisión de los protocolos de la inspección técnica de vehículos para que se compruebe la calibración de los sistemas. No anualmente, pero si cada unos años, pues se tiene en cuenta que los vehículos sufren daños -golpes de estacionamiento-, una instalación incorrecta o actualizaciones defectuosas.

Esta demanda, que se impondrá en toda Europa en un futuro no muy lejano, responde a las conclusiones referidas en el informe TÜV 2022, en el que se ha demostrado que uno de cada cinco vehículos falla. De los analizados, solamente un 0,04% fueron calificados como inseguros para el tráfico, pero es la única forma de garantizar la seguridad vial, y que no se utilice en la carretera ningún vehículo no conforme.