La Inteligencia Artificial ya ayuda a reconocer señales defectuosas y baches en las carreteras gracias a esta empresa española
ASIMOB es una compañía bilbaína que utiliza la Inteligencia Artificial para crear soluciones que analicen el estado de las carreteras. Una tecnología que ya usan instituciones españolas, tanto públicas como privadas, y de otros países de todo el mundo.
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Publicado: 02/11/2023 10:00
La Inteligencia Artificial está cada día más metida en nuestras vidas. Quién no ha visto en Internet imágenes creadas por IA, o quién no ha visto vídeos o textos generados con esta tecnología que, con el paso del tiempo, nos sorprende cada vez más.
En el mundo del automóvil, la Inteligencia Artificial está metido dentro de los coches para proporcionar asistentes de conducción que son capaces de aprender y comunicarse con el conductor de forma intuitiva. Los coches autónomos, además, usan algoritmos de IA avanzada para analizar datos en tiempo real.
Esta última tecnología es la que utiliza la empresa española ASIMOB (Advanced Services In Mobility) para proporcionar soluciones muy interesantes en el campo de la seguridad vial en las carreteras. Concretamente, su tecnología utiliza la IA para hacer las vías públicas más seguras. ¿De qué forma?
La IA para detectar señales defectuosas y baches en la carretera
Generalmente, los responsables de la gestión y mantenimiento de una carretera (a nivel nacional, local o privado mediante concesiones) utilizan «inspectores» para detectar cualquier tipo de fallo o deterioro en las vías públicas y así poder hacer las correcciones adecuadas. Las quejas vecinales y de los propios conductores también cumplen esta función.
Sin embargo, la Inteligencia Artificial viene a cumplir esta función de una forma más eficiente y económica. La tecnología de ASIMOB permite detectar cualquier cambio o deterioro en las señales de tráfico, en las marcas viales de la calzada (líneas, símbolos y letras), el estado del asfalto, barreras de protección, zonas de obras…
Un «inspector autónomo de carreteras» mucho más útil y seguro que la monitorización manual de la que hablábamos antes y con menos fallos. El CEO de ASIMOB, Ibon Arechalde, asegura que los «inspectores manuales «sacan fotos de los elementos que hay que reparar y están expuestos a situaciones de peligro solo por estar en la calzada».
«Cualquier vehículo al que le dotemos de dos dispositivos se puede convertir en un inspector de la carretera. Esos dispositivos recogen la imagen y los datos con los sensores y luego esos datos son procesados y analizados», asegura Arechalde. «El vehículo circula a una velocidad normal y detecta y registra todas las evidencias de defectos en la vía pública».
De forma genérica, la tecnología de ASIMOB abarca los siguientes campos:
- Inspecciones automáticas de señales de tráfico: Señales permanentes y temporales.
- Detección temprana y evaluación de irregularidades en la superficie: Baches, grietas, fisuras, pieles de cocodrilo, juntas, descarnaduras...
- Inventario y evaluación de las condiciones de las barreras de protección: Metálicas, de madera, de plástico, de hormigón...
- Control de señalización horizontal y vertical en zonas de obras: Señales verticales, horizontales, balizamientos, símbolos...
- Inspección automática de marcas viales: Líneas de carril y otras líneas y símbolos pintados en la superficie.
- Detección de pérdida de adherencia en el pavimento: Sensores a bordo y datos de flotas de vehículos.
Carreteras auditadas por IA en otros países
Instituciones públicas como el Ayuntamiento de Madrid, la Diputación Foral de Guipúzcoa o la Junta de Extremadura emplean esta tecnología «made in Spain». ¿Cómo? Instalando unos sensores a bordo de vehículos que van detectando las anomalías de la vía y que, en muchas ocasiones, se escapan al ojo humano.
Otras empresas u organismos internacionales también confían en ASIMOB: desde Brasil, Canadá o Países Bajos. «Nuestra tecnología se puede aplicar a cualquier país, porque es un sistema que sólo requiere instalar unos sencillos dispositivos para que funcione. El 'feedback' es perfecto porque quien nos contrata una vez, repite, porque valora el impacto que tiene en la seguridad vial”.
En función del tipo de carretera, eso sí, se necesita una tecnología más ajustada o específica. Por ejemplo, en autopistas, donde la velocidad es más alta, el criterio de calidad es más exigente. Además, gracias a la analítica de datos, se puede saber por qué un asfalto se deteriora más que otro y qué tipo de pintura es mejor para las marcas viales.
Autopistas y ciudades con estos «inspectores autónomos»
El Ayuntamiento de Cunit, en Tarragona, fue el primero en utilizar esta tecnología de Inteligencia Artificial de ASIMOB en el ámbito urbano. Porque no solo se puede usar en carreteras abiertas como autopistas o convencionales, también en las ciudades.
La IA de la compañía española ayuda, sobre todo, a monitorizar la señalización y el estado de las calles y carreteras en remoto. El consistorio catalán instaló los sensores de esta herramienta en los vehículos de la Policía Local: aprovechando que patrullan las calles a diario, se monitoriza y diagnostican los defectos e incidencias en las carreteras sin tener que esperar a las quejas vecinales.
«Para nosotros era imposible vigilar el estado de los 300 kilómetros de vías que tiene el pueblo. Es un sistema respetuoso con el medio ambiente y, a partir de aquí, han surgido otros proyectos, como la creación de una unidad de drones. La tecnología facilita mucho la vida a los municipios pequeños», asegura David Marquínez, regidor de Tecnología y Transparencia del Ayuntamiento de Cunit.
Audeca, empresa del Grupo Elecnor, monitoriza más de 4.000 kilómetros de carreteras de diferentes administraciones públicas. La tecnología de ASIMOM permite «capturar un gran porcentaje de incidencias y gestionarlas de un modo más eficaz. Todo ello deriva en un conocimiento del estado de la red viaria mucho más preciso y en la mejora de la planificación del trabajo», dice su director técnico, Miguel Justo Fernández.
Fuente: DGT / ASIMOB