La Inteligencia Artificial puede ayudar a producir más coches eléctricos: Ford ya lo está probando

La Inteligencia Artificial es uno de los temas de moda en estos últimos años, más si cabe en este arranque de 2023, donde parece que no se habla de otra cosa en redes sociales. Las aplicaciones para las IA son casi infinitas.

De hecho, el mundo del automóvil cuenta en la actualidad ya con diferentes usos de esta tecnología, si bien todavía está en una fase muy inicial y su presencia en los coches será mucho mayor en los próximos años y décadas.

La conducción autónoma, una tecnología todavía en testeo, usa mucho de esta inteligencia artificial. Incluso algunos de los sistemas de ayuda a la conducción actuales emplean la IA, si bien en su mayoría son sencillos, sin capacidad de aprendizaje.

Ahora es Ford la que quiere utilizar esta Inteligencia Artificial en su Centro de Vehículos Eléctricos de Colonia (Alemania), donde pronto se iniciará la producción de coches eléctricos.

ChatGPT es uno de los «trending topics» sobre la IA. General Motors ha sido el primer gigante automovilístico que confirma su interés en emplear este sistema de chat en sus vehículos.

Así puede ayudar la IA en la cadena de montaje

En las cadenas de producción de vehículos, siempre hemos visto como una persona era la encargada de conducir el vehículo recién salido del horno. Esto puede cambiar muy pronto, ya que Ford está en fase de pruebas de una tecnología que permitirá que el vehículo salga por sí solo de la cadena de montaje.

No solo eso, si no que los vehículos eléctricos nuevos que salgan del Centro de Colonia también podrán ir por sí solos hacia las pruebas finales, podrán enchufarse para autorrecargarse y se aparcarán por su cuenta.

Todo esto forma parte del proyecto E-SELF, que engloba diferentes iniciativas que Ford está analizando y preparando para su fábrica en Colonia, que ha recibido una inversión de 2.000 millones de dólares. La producción del nuevo Ford Explorer cien por cien eléctrico, presentado recientemente, se iniciará este mismo año.

Hyundai ya ha desarrollado un sistema de control de crucero capaz de aprender los patrones de conducción del conductor.

Sin embargo, estas pruebas de conducción autónoma se prolongarán durante los próximos dos años y medio, de la mano del Instituto de Ingeniería de Automoción de la Universidad Técnica de Braunschweig y Kopernikus Automotive. Pare ello, el Ministerio Federal de Economía alemán ha aportado 2 millones de euros para su financiación.

Cualquier vehículo con transmisión automática, control electrónico de estabilidad, dirección asistida y freno de mano eléctrico, con una unidad de comunicación inteligente adicional, podrá ser objeto de estas pruebas, que pueden llegar a implicar una docena o más de trayectos dentro de la propia fábrica gracias a la comunicación vehículo-infraestructura.

"Ford está reinventando su cartera de vehículos en Europa, y estudiar cómo producimos nuestros nuevos eléctricos es una parte integral de ese proceso. La introducción de la tecnología de autónoma en la línea de montaje podría impulsar su eficiencia y seguridad, al tiempo que permitiría a los empleados centrarse en las tareas clave", ha dicho el jefe de proyecto de Ford, Frank Schwarz.

Fotos: Ford