Irán, un interesante mercado emergente

Autovía iraní - Fotografía: Hamed Saber (CC BY)

Irán era uno de los mercados emergentes más prometedores, en lo que a automóvil se refiere, desde el inicio del milenio. Estaba creciendo de forma sostenida hasta llegar a un pico en 2011. Ese año se fabricaron 1.649.312 turismos y comerciales ligeros, según datos de la IOMV.

Como el país empezó a tener muchos problemas diplomáticos con Occidente por su empeño en tener energía nuclear -y la sospecha de que hubiese posibles usos militares- empezó a tener embargos y sanciones que afectaron mucho a su economía. En 2013 fue aún peor, pero ya en 2014 se superó el nivel de 2012.

Dos fabricantes se reparten prácticamente todo el mercado, Khodro y Sapia

La industria automovilística es el segundo sector más productivo de Irán, después de la petroquímica, y hablamos del 10% del PIB nacional. Es un país con importantes barreras comerciales que perjudica la actividad de fabricantes extranjeros que quieren vender sus productos allí.

Centro de Teherán - Fotografía: Kamyar Adl (CC BY)

Tanto Khodro como SAIPA tienen múltiples alianzas empresariales -joint ventures- con fabricantes extranjeros, que les suministran los coches desarmados para ensamblaje local. De esta forma, no importándolos enteros, tienen un tratamiento más amable en la frontera y dan trabajo en el país.

Evidentemente no todo lo que llega a este país es un último modelo, de hecho se siguen fabricando coches que en Europa se han descatalogado y dejado de fabricar hace lustros, como el Peugeot 405. Los estándares de seguridad y emisiones del lugar son mucho más blandos que los europeos.

Para la industria extranjera es un país interesante porque la demanda de "kits" también es un negocio, y las marcas de alta gama tienen su público a pesar de los aranceles de importación. En la región de Aras hay una zona de libre comercio, donde los aranceles son mucho más bajos y es fácil ver coches extranjeros, incluso muchos americanos.

En 2011 Irán fue el decimotercero fabricante mundial

En un país donde la edad media de los coches está entre 20 y 25 años, y hay más población que Turquía, existe mucho potencial de crecimiento. Si los fabricantes extranjeros dejan de tener problemas, es un mercado muy jugoso al que hincar el diente. Pero para eso hace falta estabilidad.

A fin de cuentas, Irán es un país políticamente delicado, y algunos fabricantes salieron de allí por lo tenso que se estaba poniendo el asunto. Además, está situado en una zona del mundo muy calentita, con los locos del "Estado Islámico" dando muchos quebraderos de su cabeza a su vecino, Irak.

El Gobierno de Irán es un importante accionista tanto de Khodro como de SAIPA, y la competitividad de estos fabricantes va ligada a la existencia de penalización para la importación de producto extranjero. Protegen su industria de un modo similar a como hace Rusia.

Peugeot PARS, o lo que viene siendo un 405 muy rejuvenecido

Fabricantes como PSA Peugeot Citroën o Renault están muy interesados en volver a trabajar con normalidad en Irán, dado el posicionamiento que alcanzan en mercados emergentes. Durante el periodo de embargo, han mantenido como han podido su alianza con los fabricantes locales.

Mientras los dirigentes internacionales terminan el papeleo del acuerdo de energía nuclear con Irán, los fabricantes ya están moviéndose, y preparando su maquinaria para volver a comerciar con el país asiático. No solo hay intereses occidentales, también de China, Japón y Corea del Sur.

En lo que a nosotros respecta, también es una buena noticia que se levanten sanciones contra Irán, porque su industria petroquímica podrá exportar mucho más y tal vez contribuir a bajar o mantener los precios de petróleo y gas. Las sanciones no han sido levantadas aún, toca esperar hasta el 30 de junio como fecha límite.