Izera, la marca de coches eléctricos de Polonia, hace aguas y retrasa su lanzamiento

Izera nació en pleno verano de 2020 de la mano de Electromobility Poland, un consorcio de empresas que, con la ayuda del Estado, pretendía inundar las calles del país de coches eléctricos antes de mediados de la década. Unos planes que han empezado a hacer aguas justamente después de conseguir que Geely le otorgase la correspondiente licencia de uso de su plataforma «SEA» específica para coches eléctricos.

Este nuevo fabricante había desarrollado dos nuevos eléctricos, un compacto de cinco puertas y un SUV para lanzar al mercado en 2023, en principio local, con unos precios muy competitivos y así hacer más fácil el acceso de los ciudadanos a los modelos de cero emisiones, para después implantarse en otros mercados europeos y vender hasta 100.000 unidades anuales. Una cifra más que respetable, y con la que sueñan en duplicar, según las declaraciones del máximo responsable en una entrevista con una agencia de noticias local.

La intocable clave de los eléctricos de Izera, su bajo coste

Pero todo se ha torcido en los últimos meses que, a pesar de la importante inyección de casi 53,5 millones de euros que ha recibido, necesita más de 1.280 millones de euros más para iniciar la producción. Y es que ni siquiera disponen de una fábrica. Los planes contemplaban la construcción de las instalaciones fabriles en 2021 y estrenarse a mediados de 2023, pero han vuelto a retrasarse hasta mediados de 2024, por lo que su actividad no podrá arrancar hasta 2026, como muy pronto.

Fuentes de la marca han señalado que la inyección que han recibido del Gobierno de Polonia solamente les permitirá abarcar proyectos hasta finales del próximo año 2023, pero lo que ocurra después es un misterio. Y no porque lo guarden en secreto, sino porque realmente no saben qué ocurrirá entonces. El máximo responsable de Izera y de Electromobility Poland, Piotr Zaremba, ha afirmado que están buscando inversores fuera de las fronteras de este país del centro de Europa, con la bandera de Geely, un nombre con el que es más fácil encontrar apoyo financiero.

Izera revisará el diseño pero no la batería y la autonomía

Zaremba también ha confirmado que los diseños de las propuestas actuales serán revisados para adaptarse a las tendencias estilísticas de mediados de la década, por lo que este apartado también variará. Lo que no se cambiará será la batería y sus dos niveles de capacidad, de 51 y 69 kWh, que ofrecerán entre 340 y 440 kilómetros de autonomía máxima con una carga. Unas cifras más propias del momento actual pero no para 2026, cuando está previsto que se lance al mercado el primer modelo. Algo que Izera no valora mejorar, y que apunta más a la potencia del cargador de a bordo.