KTM reabre su fábrica, pero la realidad es mucho peor y el tiempo corre en contra
La fábrica de KTM en Mattighofen ha reabierto sus puertas y la producción se ha reanudado nuevamente. La mítica marca de motos afronta dos meses, que se antojan claves, para un futuro que todavía tiene un buen número de frente abiertos y que no suponen en absoluto la salvación.

KTM ha reabierto las puertas de su fábrica de Mattighofen, un indicio de que la marca de motos ha recuperado la normalidad después de unos meses demasiado convulsos. Pero, la realidad, es muy diferente porque este es solo un primer paso hacia una recuperación que será muy larga en el tiempo, si no hay más contratiempos, a pesar de las grandes piedras que hay en el camino.
En el seno de la mítica marca de motos austriaca, el dicho «queda mucho trabajo por hacer» cobra más sentido que nunca antes. La situación no es la mejor y cada paso será un logro. Hace unas semanas se daba a conocer que los acreedores habían aceptado el plan de reestructuración de la empresa al «confiar en el enorme potencial de KTM». Una verdad como un templo, pero con una condición clave para aceptarlo que pasó por la salida del dueño de la empresa el pasado mes de enero.

Los «chollos» en las motos de KTM, Husqvarna y GASGAS
Stefan Pierer abandonó su puesto de consejero delegado pero sigue siendo uno de los máximos accionistas. Sin embargo, ahora se conocen nuevos detalles de la situación de KTM. La producción se ha retomado hace escasamente tres días, pero solamente en un turno de trabajo, en lugar de los tres, y en una sola línea de montaje, de las cuatro con las que cuentan las instalaciones.
El motivo de que la producción se haya limitado tanto es que el fabricante cuenta con un stock de unas 235.000 unidades de diferentes modelos de KTM, Husqvarna y GASGAS, de las que 100.000 corresponde a modelos del año 2024 que no se han vendido, ya que la empresa se declaró en quiebra, se paralizaron todas las actividades y ni llegaron a salir de las instalaciones. Y gracias a que se quitaron del medio a MV Agusta, si no este stock sería mayor.
Las dos marcas que siguen en poder de KTM están viéndose obligadas a vender unidades con importantes descuentos, pero eso no les ha evitado entrar en un círculo vicioso, ya que los clientes no están por la labor de pagar el precio de tarifa de los modelos 2025. Los descuentos van camino de eternizarse en las tres marcas por mucho tiempo, hasta que logren quitarse todo el stock y eso puede llevar meses.

Las deudas de KTM son demasiado elevadas, el riesgo es muy alto
Esto es un importante lastre, como también que en dos meses, KTM tenga que devolver a los acreedores nada menos que 600 millones de euros. Lo que no se sabe es de dónde va a salir esa cifra que vence el próximo 25 de mayo y Bajaj, el fabricante indio de motos, solo ha aportado 50 millones de euros. Faltan 550 millones para este primer pago, además de otros 100 para seguir manteniendo la producción los meses.
Las últimas informaciones han revelado que es Citibank quien lidera el proceso de reestructuración, y el que ha anunciado que «hay un fuerte interés» en invertir en KTM. Los posibles empiezan a acumularse y ya no es solamente BMW Motorrad. Se habla de uno de los propietarios de Remus, el fabricante de escapes que, curiosamente, se encuentra en el consejo de administración de la dueña de KTM.
El importante problema con el que tiene que lidiar KTM
Ese interés tan grande es consecuencia de que el potencial de KTM es enorme, pero quizás esté obligada a soltar más lastre y desprenderse de una de las dos marcas con las que cuenta en el sector del enduro y el motocross, o de las dos. Porque, otro importante frente que KTM tiene abierto es el de los problemas de calidad, consecuencia de llevarse el dinero.
Hubert Trunkenpolz, un antiguo miembro de la dirección de KTM, ya admitió ciertos importantes problemas de calidad el pasado verano. Los más comunes en el motor, transmisión y fallos eléctricos obligando a la marca a ampliar la garantía de fábrica a cuatro años. Más costes que se suman a unas cuentas que ya son complicadas de más y que tiene a la marca, al gobierno y al país en vilo.
