Laia Sanz se marca el objetivo de estar entre los quince primeros del Dakar

Laia Sanz llega al Dakar cargada de confianza. Tras debutar en la categoría de coches en 2022, la catalana siente haber dado un paso adelante por los ingredientes que forman esta nueva participación en el rally-raid más duro del mundo. Laia competirá con uno de los 01 Concept del Astara Team, con más experiencia y un vehículo que sobre el papel tiene un mayor rendimiento que el MINI JCW Rally que utilizó hace un año.

La catalana ha fraguado gran parte de su leyenda en el Dakar en moto, pero desde el año pasado ha dado el salto a la categoría de coches. Para la 45.ª edición de la prueba, Sanz se pondrá a los mandos de uno de los Astara 01 Concept dentro de uno de los grandes equipos patrios por la propuesta que han realizado de cara a este Dakar. Óscar Fuertes y Carlos Checa compartirán equipo con Laia, con Sergio Vallejo también vinculado a la estructura.

«Después de la experiencia del año pasado y el cambio de coche, el objetivo será intentar estar entre los quince primeros»

En este sentido, Laia Sanz ha asegurado a su llegada a Arabia Saudí: «Correr con un coche que está alimentado por e-fuel es una alternativa muy interesante porque no exige cambiar la mecánica ni el tipo de motor. Utilizar esta tecnología en el Dakar demuestra que es viable y competitiva. Nos vamos a enfrentará a la edición más dakariana de los últimos años, pero estamos listos».

«Para mi es el decimotercer Dakar. Estoy muy contenta y con muchas ganas de competir con el Astara Team. El año pasado el objetivo era acabar y aprender, para luego dar un paso adelante en cuanto a equipo y coche con el nuevo reglamento. Tenía claro que tenía que dar un paso, ir con un coche con 'rueda grande'. El Astara 01 Concept es un buggy muy diferente, pero nos va dar la posibilidad de luchar por estar adelante, que es lo que quería» añade Laia.

Sensaciones

El Astara 01 Concept es un buggy con un concepto y una técnica antagónica a la del MINI JCW Rally que utilizó Laia en 2022, algo que no parece ser un problema: «Mi mayor duda eran las dunas al principio. Sin embargo, me ha sorprendido. Es cambiar de filosofía y de mentalidad, tienes que dejar correr el coche más, no pararlo tanto. Creo que en las dunas será un poco más complicado, pero en las zonas rápidas creo que puede correr mucho más y en las piedras sufriremos menos».

«Creo que tenemos un coche duro y resistente, que normalmente no suele tener problemas y que es fiable en todo tipo de superficies. Habrá que vigilar un poco las dunas y adaptarse, pero creo que vamos a poder llevar un ritmo mucho más alto» concluye Laia a la hora de analizar su nuevo 'juguete'.

Claves y objetivo

Sobre el desarrollo de este Dakar, Laia afirma: «Va a ser más duro. Cada año lo dicen, pero este año parece que sí será así. Hay más kilómetros de etapa, no hay 'refueling' para comer algo, beber, ir al baño y descansar un poco. Eso hace la carrera más dura física y psicológicamente. También los últimos días, con muchas dunas, serán duros. Creo que será una carrera más dakariana. Es algo que me gusta, no tiene que ser tan al sprint como en los últimos años».

Y a la hora de marcarse un objetivo, Laia Sanz es muy clara: «Aunque ves los T1+ que hay y el nivelazo de los pilotos hacen difícil hablar de una posición final, después de la experiencia del año pasado y el cambio de coche, el objetivo será intentar estar entre los quince primeros. Es complicado, pero se puede hacer. Hay que revisar los fallos del año pasado, empezar un poco más despiertos. Si llevamos un ritmo constante, creo que podemos conseguirlo»