Cómo el efecto «YOLO» explica el imparable éxito de Lamborghini, el fabricante italiano vive su mejor momento

Que una marca como Lamborghini sea un éxito es algo difícil de entender cuando su gama de modelos cuesta un dineral. Los dos ojos y los riñones no son suficientes para pagar uno de los tres representantes de la firma italiana, sin meterse en caprichos de personalización o hablar de su mantenimiento. La realidad es que, desde hace unos años, Lamborghini vive el mejor momento de su historia.

El Huracán ya ha pasado a mejor vida como uno de los modelos más vendidos, y el Revuelto va camino de convertirse en una leyenda no sólo por su tecnología, sino porque el fabricante de Sant'Agata Bolognese ya ha confirmado que tiene la cartera de pedidos completa hasta 2026. El mismo objetivo que esperan cumplir con el nuevo Temerario que se ha presentado en la Semana del Motor de Monterey.

El nuevo Temerario aspira al mismo éxito que el Revuelto

El superdeportivo italiano nada tiene que ver con el modelo al que ha sustituido, recibiendo tantas críticas por su diseño como respuestas positivas, algo que siempre suele pasar en todas las marcas, especialmente cuando el recién llegado tiene la difícil misión de relevar a un mito. El nuevo Temerario ya no se puede considerar un modelo de acceso porque su potencia está más cerca del hermano mayor, con nada menos que 920 CV.

Los casi 300 CV de diferencia que mantiene con su antecesor también han aparejado un peso extra de 300 kilogramos por el sistema híbrido y la batería que aloja en sus entrañas. El propio Stephan Winkelmann ha admitido en unas declaraciones que «Lamborghini es una marca que vendería prácticamente cualquier cosa», de lo que se desprende que no han necesitado invertir más en otras áreas como el diseño con semejante rendimiento.

Un éxito continuado desde hace 20 años y fortalecido por el Covid-19

Winkelmann ha destacado que el nuevo Revuelto es un modelo más pesado y no lo hace más difícil de vender. Ahí están sus cifras y su larga lista de espera, añadiendo cuál es la clave que ha hecho tan fuerte a Lamborghini en los últimos tiempos. Se trata del efecto «YOLO» y nació al terminar la pandemia del Covid-19, y responde a la idea de que «Sólo se vive una vez».

La explicación de Winkelmann es bien sencilla: ¿por qué ahorrar cuando otra pandemia puede derribarte mañana? «A pesar de la crisis global que tenemos aquí o de las crisis allá o allá, en los mercados o en la geopolítica, todavía somos fuertes. La gente todavía quiere comprar nuestros coches y tenemos que afrontar largos plazos de entrega». Lamborghini ya ha batido récord en el primer semestre del año, y aunque cruzan los dedos, esperan que la segunda parte sea igual de buena o más, augurando un nuevo récord de ventas que viene repitiéndose desde el Gallardo.