La solución de Land Rover para sus futuros SUV y todoterrenos eléctricos pasa por el hidrógeno, así es su tecnología FCEV
Land Rover ha sido sorprendida realizando pruebas con hidrógeno. La marca británica ya confirmó hace unos meses su intención de apostar por este combustible de cero emisiones para sus futuros coches eléctricos, habida cuenta del elevado peso de las baterías. El proyecto ZEUS ha llegado al lujoso Range Rover.
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Publicado: 29/08/2023 08:00
Land Rover también se sumó a la estrategia de cero emisiones de la Unión Europea, poniendo el listón más alto que la gran mayoría de sus rivales. La firma británica anunció, hace poco más de dos años, el proyecto «ZEUS», presentando un primer prototipo equipado con una pila de combustible alimentada por hidrógeno basada en el Defender.
La marca confirmó que el modelo de acceso a la gama de productos se había equipado con un sistema de propulsión de hidrógeno completo, un demostrador de la tecnología FCEV que permitiría a los ingenieros comprobar el funcionamiento a bordo, su rendimiento y, por supuesto, la capacidad todoterreno propia del fabricante, al mismo tiempo que ponerse en el lugar de los clientes a la hora de repostar o remolcar. Unas pruebas que comenzarían a finales del pasado año 2021, pero nunca ha sido cazado.
El proyecto ZEUS de Land Rover apuesta por el hidrógeno en sus SUV
Del prototipo del Defender FCEV no ha habido rastro alguno, pero sí del lujoso Range Rover porque, hace tan solo unos días recibimos unas interesantes fotos espía de este modelo equipado con una pila de combustible. El modelo más exclusivo y alto de la gama será 100% eléctrico antes de finales de año, comercializando el primer modelo de la gama de eléctricos en 2024. Pero Land Rover sabe que los coches alimentados por batería tienen un serio problema, y más notable en los todoterrenos y SUV: el peso.
La única forma de desprenderse de los centenares de kilos de una batería pasa por una pila de combustible, la clave del Proyecto «Zeus» en el que se halla embarcada Land Rover junto a importantes especialistas en la materia. Fuentes externas a Land Rover han explicado que el sistema de pila de combustible es escalable, lo que permite adaptarse tanto a un Defender como a un Range Rover, contando con dos tanques de almacenamiento: uno en transversal bajo el maletero, otro en longitudinal aprovechando el túnel de transmisión delantero y una batería de por medio debajo de los asientos traseros.
La pila de combustible rebaja el peso frente a los eléctricos de batería
El sistema desarrollado para Land Rover cuenta con una pila de combustible con una potencia máxima de 90 kW y con una potencia pico de hasta 300 kW, asociada a dos motores eléctricos con un rendimiento de 147 kW cada uno, lo que supone un total de 294 kW. O, lo que es lo mismo, 399 CV. La batería, cuya química se desconoce, ofrece una capacidad de 16,7 kWh, datos que hay que coger con pinzas ya que no existe una confirmación oficial, ni tampoco se sabe su autonomía. Lo que sí es una realidad es que, en términos de potencia, sí dispone de un rendimiento a la altura de un Range Rover que abrirá un nuevo capítulo pero a muy largo plazo.