Lin Jarvis: «Maverick Viñales todavía lidia con sus demonios internos»

Maverick Viñales y Yamaha protagonizaron uno de los episodios más polémicos de 2021 con su divorcio. Tras varios cruces de declaraciones, el piloto español y la firma del diapasón llegaron a un acuerdo para disolver su vínculo y separar sus caminos. Viñales terminó recalando en Aprilia, mientras que Yamaha ha acabado la temporada con el campeón Fabio Quartararo y el italiano Franco Morbidelli en su estructura oficial. Pese a todo, esta ruptura ha dejado una enorme cicatriz y así lo acreditan las palabras de Lin Jarvis, jefe de equipo de Yamaha. De hecho, el que ha sido jefe de Viñales durante las últimas temporadas considera que Maverick Viñales todavía tiene que purgar muchos pecados para volver a ser rápido, incluso si tiene el mismo talento que puede tener Fabio Quartararo.

'Mack' llegó a Yamaha en la temporada 2017 tras competir durante sus dos primeros años en MotoGP con Suzuki. Con sólo ocho victorias en su palmarés juntos, el vínculo entre Viñales y Yamaha se ha ido deteriorando hasta su definitiva y traumática ruptura en 2021 tras el intento del piloto español de dañar deliberadamente el motor de su M1 en Austria. Una situación que terminó por dinamitar todo, según explica Lin Jarvis: «Maverick es una persona complicada, incluso si comparte el mismo talento natural bruto que tiene Fabio. Sin embargo, Viñales tiene el problema de conseguir ser así de forma consistente. Su carácter tiene altibajos y eso es en lo que Fabio ha mejorado. Quartararo también ha tenido sus altibajos, pero este año ha logrado arreglar esto para minimizar los puntos débiles y maximizar sus puntos más altos».

En esta línea, Jarvis ha añadido: «Creo que es lo que siempre dijimos con Maverick. Siempre hemos sabido que tiene el potencial y este año comenzaba su quinto año como de Yamaha en su equipo de fábrica. Podía haber hecho este año algo grande como finalmente lo ha hecho Fabio. Ganó la primera carrera. Creo que Maverick era plenamente consciente de lo rápido que puede llegar a ser Quartararo y creo que de alguna manera Viñales no supo gestionar esto. Viñales todavía está lidiando con sus demonios internos. Y creo que eso es algo que sólo él puede arreglar, entre otras cosas porque depende de su cabeza. Sólo él puede realmente manejar su mente y su vida para poder ser el gran piloto que ha demostrado ser en el pasado».

Fotos: MotoGP