Responsables de Lotus adelantan conclusiones positivas de las pruebas del nuevo Evija
Poco antes de terminar el pasado año, Lotus anunciaba el comienzo de las pruebas en circuito de su nuevo hypercar eléctrico, el nuevo Lotus Evija. Era el turno de poner a prueba en asfalto el tren motriz eléctrico capaz de desarrollar una potencia máxima de 2000 CV, el modelo más extremo de la marca británica. Ahora, llegan las primeras conclusiones.
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Publicado: 10/01/2020 08:00
Desde que Lotus se encuentra bajo el paraguas de Geely, la marca británica quiere demostrar que su esencia principal sigue siendo la misma, pero con unas mayores pretensiones. La mejor demostración de esta última es el Evija, un demostrador de tecnología al más alto nivel que se venderá en una exclusiva edición limitada de 130 unidades.
Completamente eléctrico, es un deportivo equipado con un sistema compuesto por cuatro motores eléctricos que desarrollan una potencia máxima de 2000 CV y un brutal par motor máximo de 1.700 Nm, disponible en su totalidad desde el arranque. Por tal razón, las pruebas que ha iniciado sobre asfalto real se están llevando a cabo en una pista de despegue y aterrizaje de aeronaves.
Del Evija solamente hay tres prototipos, y Gavan Kershaw, director de integridad de producto de Lotus Cars, se ha sentado a los mandos en una primera prueba, dando buena cuenta de sus sensaciones y resultados, diciendo que "El modelo está en un estado completamente puro en este momento, sin control de estabilidad ni vectorización de par motor, por lo que podemos evaluar los fundamentos del chasis para crear la ventaja mecánica antes de que se agreguen otras capas, como la electrónica".
Kershaw, continúa explicando que "En este estado, podemos realmente leer el coche. Más tarde, ajustaremos lo que hemos ganado como una ventaja mecánica a medida que agregamos capas. Es la forma de trabajar de Lotus: obtener los fundamentos desde el principio y usar la aerodinámica, cinemática de la suspensión y geometría de referencia para sentir la respuesta del vehículo".
El responsable apunta que el segundo prototipo es el más avanzado de los tres que existen, contando con una suspensión especificada por el cliente, el tren motriz eléctrico, frenos y paneles de la carrocería de fibra de carbono y el interior más completo hasta el momento, con elementos de producción como los asientos y una consola central flotante, además de un sistema hidráulico para el despliegue de los sistemas de aerodinámica activos.
Kershaw explica de esta unidad de pruebas que "Evaluamos la estabilidad y la agilidad en las curvas cerradas, hemos hecho aceleraciones rápidas para resolver la división del par y observamos el agarre y la respuesta de los neumáticos, por lo que ahora nos encontramos en una fase de detalle, validando la respuesta progresiva de los pedales. Sabemos que hay una enorme cantidad de par motor, los conductores solo lo querrán cuando lo soliciten con el pie derecho, así que hay que buscar el equilibrio del acelerador".
El equipo responsable del proyecto Evija ha señalado que, a pesar de que la configuración de este modelo es mucho más especial por su enorme caudal de potencia, se ha tratado de integrar la experiencia de los Exige y Evora, haciendo coincidir las miles de horas de simulaciones por ordenador y los análisis de física con la realidad; por ejemplo, evaluando que el ángulo del volante es seguro y equilibrado con una respuesta del vehículo a diferentes velocidades, dado que la agilidad tiene que ser la misma circulando a 50 o 320 km/h.