LYNK & CO ultima su desembarco en Europa

LYNK & CO es una iniciativa audaz de Geely para conectar con una clientela que ahora tiene menos de 40 años y tiene ideas más abiertas sobre la forma de propiedad de un coche. La propiedad no es la única opción, también está el renting e incluso poder ganar dinero alquilando el coche a terceras personas cuando no se necesite.

Al igual que Tesla, LYNK & CO venderá sus coches directamente a clientes finales, ahorrándose el modelo de venta tradicional de concesionarios. En nuestro continente existirán algunas "stores" donde se podrán ver y tocar antes, aunque no parece algo tan importante para la clientela a la que quieren llegar.

Fijémonos en este dato: las primeras 6.000 unidades en China fueron vendidas en dos minutos -como suena-, antes de llegar a los puntos de venta tres semanas después. Desde luego, interés por su primer modelo -el crossover 01- hay, en otra época sería inconcebible vender un coche que nadie ha visto en una exposición.

LYNK & CO 01

Ahora mismo los LYNK & CO 01 se producen en Luqiao (cerca de Shangái) para abastecer al mercado doméstico chino, en la misma planta donde ya se produce el Volvo XC40. Ambos coches comparten multitud de elementos además de las plataformas, pero con una personalidad diferenciada, no son remarcados más baratos.

Alain Vissler, vicepresidente senior de LYNK & CO, declaró en el simposio de CAR en Bochum que de aquí a dos meses se anunciará de dónde vendrán los nuevos crossover. La opción más lógica es Gante (Bélgica), donde se produce el XC40 europeo, así la cadena logística ya estaría resuelta casi en su totalidad.

Otra posibilidad es encargar su fabricación a terceros, y suenan claramente dos nombres: Valmet Automotive (Finlandia) y Magna Steyr (Austria). El comodín sigue siendo traerlo desde China. Volvo ya produce modelos "made in PRC" para mercados de exportación como Estados Unidos, el tabú está superado.

LYNK & CO 01

Los responsables de la submarca ven un alto potencial de crecimiento, en 2018 se pueden alcanzar las 100.000 unidades en China, una previsión realista de acuerdo a Vissler. Para 2021 se espera alcanzar un volumen anual de medio millón de unidades, muy ambicioso para una marca nueva.

Al cliente se le ofrecerá tecnología, diseño y la garantía de ser prácticamente un producto Volvo pero con un precio más ajustado. Eliminando de la distribución la figura del concesionario se pueden ajustar más los márgenes sin comprometer la calidad.

Es más, LYNK & CO no seguirá el típico planteamiento de las marcas Premium de mucha libertad de elección. Los clientes podrán elegir entre paquetes cerrados para simplificar el proceso de producción y logística, otra forma de ajustar el precio. ¿Y qué hay de la postventa? La red Volvo se puede ocupar de ellos.

Cadena de producción del Volvo XC40 en Gante (Bélgica)

Los novedosos planteamientos de LYNK & CO no son compartidos por el resto de la industria. Sin ir más lejos, Mikel Palomera, a la sazón director general de SEAT en España, cree que los clientes que no quieren pisar un concesionario son "bichos raros", así lo dijo en el Congreso FACONAUTO celebrado hoy.

No solo el modelo de venta es poco habitual, también la figura de ofrecer el coche propio para alquiler de forma automatizada. Esto puede ser muy ventajoso para quien use el coche de forma esporádica, evitando la depreciación de tener un coche parado cuando no lo necesita. Habrá que ver la respuesta que tiene en la clientela.

A lo largo de los próximos años se van a probar distintos modelos de negocio como alternativa al fabricar y vender. Por ejemplo, hay fabricantes que producen coches exclusivamente para alquilarlos por minutos, así pueden ganar dinero de gente que no se plantea ya tener un coche en propiedad o un segundo vehículo para uso utilitario.