Un estudio de Mazda concluye que los conductores europeos prefieren los motores de combustión
Mazda continúa con su estrategia de análisis para conocer de primera mano las preferencias de los conductores europeos. Si hace unos meses ya publicó los resultados de una encuesta apuntando que los usuarios del Viejo Continente prefieren conducir por sí mismos antes que doblegarse a la conducción autónoma, ahora lo hace con los motores.
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Publicado: 13/02/2018 14:00
Mientras todos los fabricantes se encuentran en pleno proceso de desarrollo y mejora de diferentes sistemas de electrificación y de propulsión alternativa ampliando la oferta a todos los segmentos de mercado en los que ofrecen sus productos, se podría decir que casi "los están metiendo con calzador" entre los clientes, lo cual también es lógico que pretendan aumentar las ventas con modelos más respetuosos con el entorno.
Pero Mazda prefiere saber qué necesitan los conductores europeos y cuáles son sus preferencias. Así, después de presentar las conclusiones sobre el análisis sobre las preferencias entre conducción autónoma y humana, una nueva parte del programa de investigación de "Mazda Driver Project" revela que casi el 60 por ciento de los conductores europeos prefieren el motor de combustión -gasolina y diésel- a los diferentes sistemas de propulsión alternativos.
Este nuevo estudio trata de averiguar más profundamente las estrategias y pasos a seguir en lo que la marca nipona llama "Drive Together" que busca el placer que proporciona la conducción de sus modelos, para lo cual encargó una investigación de mercado en forma de encuesta a una consultora especializada que ha analizado a 11.008 personas en los once principales mercados europeos.
Pero mientras que algunos fabricantes ven que las posibilidades del combustible diésel se reducen cada vez más por el endurecimiento de las normativas de gases contaminantes, un 58 por ciento de los encuestados ve todo lo contrario creyendo que todavía hay grandes posibilidades de mejorar la tecnología de los propulsores alimentados con gasolina y diésel, porcentaje que se ve aumentado hasta el 60 por ciento en países como Alemania, España y Suecia, y un 65 por ciento en Polonia.
Profundizando un poco más en las conclusiones de la encuesta, un 31 por ciento de los encuestados desea que los diésel continúen en el mercado aunque los eléctricos también se vendan. Y un dato curioso es que el 33 por ciento del total de la población encuestada apunta que aunque los costes de los vehículos de combustión fueran iguales a los de los eléctricos, todavía continuarían apostando por los gasolina y diésel, aumentando hasta un 54 por ciento entre los italianos, lo cual podremos ver en las nuevas generaciones del Mazda3, Mazda6, CX-5 o CX-3, entre otros.
Estos resultados ponen de manifiesto que gran parte de los conductores no está de acuerdo con las opiniones de los fabricantes que apuestan más por la propulsión alternativa de la electricidad en forma de sistemas de propulsión completos asegurando que es el futuro y casi llevando a los motores de combustión a un olvido. Y frente a esta teoría, la propia marca japonesa apunta que continuarán combinando la electrificación y la combustión con diferentes soluciones, entre ellas la tecnología "SKYACTIV-X", el primer motor de gasolina comercial del mundo que utiliza encendido por compresión combinando lo mejor del mundo de la gasolina y del diésel.
Al mismo tiempo, también supone dar un paso adelante en la nueva estrategia a largo plazo que conocemos como "Zoom-Zoom sostenible 2030", y que prevé el desarrollo de tecnologías en todos los ámbitos, desde cómo trazar la oferta más racional y adaptada a los clientes como la innovación necesaria para combinar electricidad y combustión; pero de una cosa sí que están seguros en la marca japonesa, y es que estos resultados avalan su apuesta por perfeccionar el motor de combustión interna.