El Mazda2 prueba un innovador combustible biodiésel en la resistencia japonesa
Mazda ya se ha enfrentado al campo de la electrificación, estrenando la tecnología PHEV en su oferta de modelos. El siguiente paso es la electrificación en la que la recuperación del motor Wankel es clave. Pero la firma nipona apuesta también por los combustibles sintéticos, y por el biodiésel que prueba en carreras japonesas.
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Publicado: 22/12/2022 12:00
Los fabricantes japoneses se han adueñado de una de las competiciones que se celebran exclusivamente en el país del sol naciente como banco de pruebas de las futuras tecnologías de propulsión en las que trabajan. El hidrógeno caliente, como se le llama a los nuevos motores térmicos tradicionales que utilizan este elemento químico como combustible, está siendo probado por Toyota en la carrera de resistencia de 24 horas de la Serie Super Taikyu.
El protagonista de casi cualquier competición es la habilidad de los pilotos para alzarse al puesto más alto del cajón, pero en esta competición japonesa, esta destreza ha sido desplazada. Lo importante es el rendimiento de las diferentes tecnologías que se testan para, en un futuro, sean lanzadas al mercado. Los de Hiroshima se han sumado también, pero no con hidrógeno, sino con un prototipo del Mazda2 que se alimenta de combustible sintético.
El biodiésel de Mazda es un combustible 100% ecológico
De la mano del equipo Mazda Spirit Racing, el Mazda2 Bio Concept participa en la categoría «ST-Q» ya que se trata de un vehículo especial no homologado. El motor equipado es un diésel Skyactiv-D de serie, alimentado por un tipo de combustible biodiésel fabricado con aceite de cocina usado y grasas de microalgas. Una tecnología que la marca japonesa lleva años estudiando y de la que destaca una cualidad muy importante: no interfiere en la cadena alimentaria ni tampoco en la deforestación.
Mazda ha explicado que este biodiésel está compuesto de una serie de aceites y grasas que generan las microalgas de la especie «Euglena» mezclado con los aceites usados de las cocinas y biomasa generada a partir de otras plantas que no han mencionado. El resultado se conoce como «SUSTEO», y cuenta con las propiedades químicas y técnicas necesarias para ser considerado un gasóleo por la normativa industrial nipona.
Mazda estrenará su biodiésel en Japón a partir de 2025
Las pruebas realizadas a bordo del Mazda2 han demostrado un «funcionamiento perfecto», limitándose a señalar que ya trabajan en un motor con especificaciones más potentes que pondrán a prueba en 2023 a bordo del Mazda3. El biodiésel se puede mezclar con carburantes actuales para rebajar las emisiones contaminantes, incluidos motores electrificados, en los que no es necesario realizar adaptaciones en los sistemas de inyección. Una interesante solución que, en un principio, no estará disponible fuera de Japón, donde sí está previsto que se fabrique este combustible a partir de 2025 con un objetivo comercial.
