Uno de los siete McLaren F1 'americanos' a la venta

El especialista en vehículos clásicos y exóticos ISSIMI ha anunciado la puesta a la venta de un magnífico ejemplar del McLaren F1 de calle. Esta unidad no se corresponde con ninguna versión rara o de competición del modelo, pero cuenta con una configuración poco habitual, un gran estado de conservación y un historial muy interesante.

Presentado a inicios de la década de los noventa, el McLaren F1 comenzó su producción en 1992. Desde entonces y hasta 1998 solo fueron fabricados 106 ejemplares en Woking. Esta cifra incluye la producción total del modelo incluyendo versiones de competición, por lo que solo fueron ensambladas 64 unidades de calle. De estas, solo 7 fueron destinadas originalmente a los Estados Unidos y el ejemplar rojo que aparece en estas fotografías es precisamente uno de ellos.

Concretamente, esta es una de las solo 2 unidades de calle que salieron de Woking en color rojo Grand Prix y cuenta con un estado de conservación magnífico, como podemos ver en las imágenes y el extenso vídeo preparado por el especialista de clásicos, quien asegura que esta pieza ha sido excepcionalmente preservada y mantenida durante todos estos años. Aunque no se ha revelado el kilometraje del ejemplar, sí que han confirmado que el vehículo cuenta con algo de uso, por lo que no ha permanecido oculto en un garaje durante décadas, como la mayoría de estos modelos de colección.

El precio de esta unidad tampoco ha sido revelado, pero teniendo en cuenta que las versiones más raras de este modelo rondan los 20 millones de dólares y que los ejemplares de calle han llegado a superar los 15 millones, podemos suponer que este ejemplar va a contar por un precio de 7 cifras.

A pesar de que es un ejemplar muy particular, por ser uno de los solo 7 ejemplares que fueron directamente de Woking a Estados Unidos y además uno de los poquísimos fabricados en color rojo Grand Prix, a nivel mecánico nos encontramos con la variante básica del modelo. Equipado con el V12 atmosférico de 6.1 litros que entregaba una potencia de 627 CV (618 hp) y 650 Nm de par máximo. Gracias a estas cifras de rendimiento era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3.7 segundos y en unas pruebas en Ehra-Lessien en 1998 logró alcanzar lo que en aquel entonces era la velocidad máxima más alta para un vehículo de producción, 386.4 km/h. Aunque este sigue siendo el récord de velocidad absoluto para un vehículo de producción atmosférico.

McLaren F1 #042.