Mercedes-AMG, dividida por la tecnología híbrida del AMG C 63 que llegará en 2021
Ya sabemos que el nuevo Mercedes-AMG C 63 contará con un motor de cuatro cilindros bajo el capó, y que será el primer modelo de la marca deportiva en ser híbrido. Pero hay muchas incógnitas alrededor de la nueva versión deportiva del Clase C. El punto de partida está claro, el gran "quiz" de la cuestión es decidir qué sistema utilizar, híbrido convencional o enchufable.
3 min. lectura
Publicado: 03/02/2020 18:00
Te lo adelantamos en exclusiva, el primer híbrido de Mercedes-AMG será la nueva generación del C 63. La marca deportiva tiene claro que la electrificación es la única opción posible para poder rebajar las emisiones, y la orden de Mercedes es clara: reducirlas al máximo posible, especialmente porque el desarrollo de los eléctricos es más retrasado que el de los modelos de combustión.
A estas alturas, cuando el desarrollo del nuevo Clase C está muy avanzado y ya acumula más de un año en pruebas, la sección de altas prestaciones tiene un problema encima de la mesa: decidir la fórmula idónea de propulsión, si híbrido convencional o un enchufable. Los dos aumentarán el peso, pero el primero menos que el segundo. El factor "peso" es un fijo en la ecuación, suficiente con el de la batería equipada, por lo que añadir el sistema de recarga es, para algunos, necesario y para otros, todo lo contrario, un lastre.
Lo que sí es fijo ya es el motor de combustión, el nuevo M139 que se ha estrenado en el AMG C 63.
Cifra respetable pero quieren más. Mercedes-AMG no es una marca que precisamente reduzca las prestaciones y potencia para salvaguardar los consumos y emisiones, sino que prefiere investigar y desarrollar nuevas tecnologías para ofrecer un modelo a su altura. Con esta configuración descrita, que ya se está probando desde hace un tiempo, el problema principal es la batería y el uso de su capacidad.
¿Autonomía en modo eléctrico o más potencia? Esta es la cuestión que tiene partes enfrentadas en la marca deportiva, y te podemos decir que la segunda opción es la que está ganando posibilidades, por lo que una batería de baja capacidad es una solución factible y destinar la energía almacenada para una función "boost" con una duración mayor del corto espacio que habitualmente se da en estas circunstancias, la misma solución híbrida que McLaren también está desarrollando para su nueva generación de deportivos.