¿El prestigio de las marcas Premium se tambalea? Cuatro grandes alemanas viven de una renta que se acaba y con las chinas pisando muy fuerte por detrás

Las cuatro grandes marcas alemanas, sacando a Porsche, están empezando a ver cómo sus cifras de producción se tambalean seriamente. Hace unas semanas que los responsables de estos fabricantes sacaron pecho de los resultados en los primeros seis meses del año, anunciando unas cifras muy elevadas de producción y, por supuesto de beneficios, pero no es oro todo lo que reluce.

La situación parece idílica pero esconde un importante dramatismo detrás de estas Premium. La KBA, la máxima autoridad del transporte en Alemania, ha determinado unas cifras de producción en las cuatro marcas por debajo de las de pre-pandemia, y no es nada bueno el panorama que tienen encima, como tampoco lo es la tendencia y lo que se les viene encima. Si las previsiones se mantienen, en los resultados del año fiscal que conoceremos en marzo de 2024, no podrán presumir de récord en 2023.

El modelo de agencia retumba los cimientos de las marcas alemanas, antes de implantarse

El hecho de que BMW esté un diez por ciento por debajo comparado con los primeros meses de 2019 y que Mercedes triplique a los bávaros es un importante problema. En estos últimos meses, las cifras de producción han «mejorado» al vivir de la renta de la importante acumulación de pedidos debido a la escasez de algunos microchips y otros componentes, pero ahora la situación es muy distinta, porque las centrales de estas marcas, incluidas también Audi y Volkswagen, reciben cada vez menos pedidos de los concesionarios europeos para el tercer y cuarto trimestre del año.

Por lo pronto, no han señalado pérdidas, algo ilógico si tenemos en cuenta los cambios de precios de los coches nuevos al alza, pero es una situación con muchos visos de complicarse y vislumbrar un futuro a corto y medio plazo más negro con un factor clave. Las cuatro marcas ya han comenzado a operar en algunos países europeos con el formato de agencia y, aunque no está implementado en su totalidad, sí han empezado por eliminar los descuentos y las campañas comerciales, lo que ha hecho que los clientes cierren el grifo de los pedidos.

Las marcas chinas obligarán a volver a los descuentos en los coches nuevos europeos y Premium

Los clientes no se oponen a engordar los precios, pero reclaman descuentos comerciales que las marcas niegan, con lo que las consecuencias son las que son. Ante esta situación, lo ideal es reconocer el error y dar marcha atrás, pero es algo que las marcas no suelen hacer hasta que los beneficios caen estrepitosamente. Y lo harán más pronto que tarde, porque las marcas chinas vienen pisando más que fuerte y éstas no van a renunciar a los descuentos. Entonces, no podrán culpar a los microchips o a la guerra de Ucrania y no servirá de nada las expresiones tipo «esto es una marca de prestigio».