Desmontamos la configuración mecánica del nuevo Mercedes Clase A híbrido

Un prototipo del nuevo Mercedes Clase A Hybrid, cazado en las pruebas de invierno que la marca lleva a cabo en Suecia

Por primera vez lo vimos este pasado verano con dos tapas en ambos lados de la carrocería, e incluso con parte de la batería al descubierto si mirábamos por debajo del paragolpes trasero. Las últimas últimas fotos espía de este modelo cazado en Laponia ya ocultan la batería con un protector especial; pero, ¿dónde está la salida de escape del motor de combustión?

Ya que algunos piensan que esta unidad de pruebas podría tratarse del modelo de producción basado en el Mercedes EQA Concept, podemos afirmar con rotundidad que no lo es, porque los modelos de la nueva gama de eléctricos EQ no serán meras versiones eléctricas de los modelos de combustión, sino que su diseño será completamente diferente y mucho más vanguardista.

Pero, también creemos conveniente estudiar un poco más a fondo esta nueva versión híbrida enchufable del nuevo Mercedes Clase A que, si sigue los planes de la marca, su nombre comercial será A 220 e. Y es que nuestro fotógrafo en Suecia aprovechó la unidad aparcada para fotografiar la parte inferior del vehículo porque si se trata de un híbrido enchufable -como revela su adhesivo en el parabrisas- en algún sitio ha de estar la salida de escape.

Vista de la parte trasera del nuevo Mercedes Clase A. Se ven los brazos de la suspensión y el protector de la batería, pero ni rastro del terminal de escape

Que no la veamos no quiere decir que no disponga de ella. En algunas ocasiones, cuando recibimos fotos espía, las informaciones no se corresponden con la realidad; los fabricantes tratan de esconder y disimular al máximo determinados detalles y elementos para engañar, pero no montan -o desmontan- componentes del modelo definitivo así porque sí, ya que se prueba todo.

¿Podría estar escondida en el paragolpes? Es una posibilidad, pero los ingenieros de la marca han sido muy astutos, ya que al ser un modelo de tracción delantera no existe un gran túnel de transmisión para alojar un cardán para transmitir la potencia al eje trasero, que es lo que ocurre en los modelos de propulsión de la marca de la estrella a partir de la Clase C.

De esta forma, tanto el tanque de combustible -que será de menor tamaño que los de las versiones de combustión- como la batería de 13,5 kWh se encuentran debajo de la banqueta trasera, mientras que el tubo de escape se encuentra bajo el motor, acortado y saliendo hacia un lateral por detrás del eje delantero.

La tapa de recarga de la batería en el lado derecho es nueva. La toma de repostaje de combustible en el Mercedes Clase A se realiza por el lado izquierdo

Ser de tracción delantera incide sobre el espacio interior, ya que no resta espacio ni a las plazas traseras ni al volumen del maletero, pero más especialmente en el caso de la altura en las plazas traseras se vería reducida considerablemente al tener que elevar la banqueta para poder dar cabida a todo el sistema de escape.

Las versiones híbridas enchufables de Mercedes cuentan con un módulo híbrido en la transmisión automática de nueve velocidades 9G-TRONIC PLUS, contando con el motor eléctrico y un embrague adicional entre el motor de combustión y el eléctrico, de forma que cuando se activa el modo de conducción eléctrica se desacopla el de combustión.

En el caso del nuevo híbrido de la Clase A, esta solución encierra algunos problemas, especialmente porque la diferencia con los Clase C y Clase E es la disposición del motor de combustión -en éstos está colocado longitudinalmente y en el compacto de forma transversal- no dejando un gran espacio adicional para este montaje.

Así será el cuadro de instrumentos de la versión híbrida enchufable del nuevo Mercedes Clase A 220 e

Y como lo que se trata es de evitar problemas, la solución por la que ha optado Mercedes es idéntica a la del BMW 225xe iPerformance: el motor de combustión y la caja de cambios automática en el eje delantero y el eléctrico y una transmisión adicional de dos velocidades en el eje trasero.

Esta opción es posible gracias al nuevo motor de gasolina que ha desarrollado junto a Renault, de cuatro cilindros y con 1.3 litros turbo al que Mercedes ha denominado internamente como M282, y en la marca del rombo Energy TCe debutando en la gama Scénic. Con 136 CV y un motor eléctrico de 82 kW -unos 110 CV- la potencia conjunta equivalente será de unos 240 CV.

Esta opción tiene dos ventajas muy favorables con respecto a la anterior y es que la disposición del motor eléctrico permite directamente contar con tracción integral sin una conexión mecánica entre los ejes como sí lo es en las versiones 4MATIC y, además, permite comportarse como un eléctrico puro aumentando la eficiencia, ya que la potencia del motor eléctrico no tiene que pasar por la transmisión automática de nueve velocidades.

Fotos: Carpix