Mercedes tantea el uso del hidrógeno con este Clase E

Hemos logrado cazar una extraña mula de Mercedes destinada a probar el nuevo sistema de pila de combustible de hidrógeno de la marca, el sistema F-Cell. Esta unidad cuenta con una más que visible boca de llenado lateral para el hidrógeno.

Mercedes tantea el uso del hidrógeno con este Clase E

3 min. lectura

Publicado: 28/09/2017 12:00

Mula del sistema F-Cell de Mercedes.

Aunque la temporada de verano prácticamente ya ha acabado para los equipos de pruebas de las marcas desplazadas al sur peninsular, nuestros fotógrafos han logrado cazar una de las mulas de pruebas más interesantes del año, un Mercedes Clase E Estate empleado por la marca para testar el sistema F-Cell, el nuevo sistema híbrido con pila de combustible de hidrógeno de la marca alemana.

Como podemos ver en las imágenes, el ejemplar está basado en el Mercedes-AMG E63 Estate, y su carrocería no delata ninguna diferencia con respecto al modelo original, salvo por el evidente añadido lateral de color blanco, la toma de llenado del hidrógeno gaseoso que alimenta la pila de combustible.

Hace solo unas semanas, en el Salón de Frankfurt 2017, la marca alemana presentaba una unidad de preproducción del nuevo Mercedes GLC F-Cell, el primer crossover híbrido enchufable alimentado por hidrógeno de la historia. Este emplea un esquema formado por un motor eléctrico que está alimentado por la pila de hidrógeno o por unas baterías que pueden ser recargadas en la red eléctrica, por lo que dispone de una potencia de 200 CV (147 kW) y un par máximo de 350 Nm, con una autonomía total de 486 kms, de los cuales, 49 pueden realizarse en modo eléctrico puro.

Calcula ahora el precio de tu seguro de coche

Calcula tu precio online

La boca de llenado es evidente.

Esta unidad de pruebas cuenta con los emblemas de la versión AMG E63, aunque el paragolpes frontal se corresponde con el que montaba el Clase E Estate convencional anterior al último facelift del modelo. Además, aunque a priori no sean operativos, también cuenta con las salidas de escape habituales en el paragolpes trasero. Probablemente, los responsables del equipo de pruebas decidieron no eliminarlos, aunque la presencia de la boca de llenado es harto evidente.

Esta mula de pruebas debe estar destinada a testar el sistema F-Cell, o una evolución de este, y no solo para el próximo GLC F-Cell, sino para los modelos que le seguirán en la gama.

El sistema F-Cell opera de una manera muy similar a los plug-in hybrids convencionales. Aunque solo dispone de un motor, este puede ser alimentado por las baterías, que podemos recargar nosotros mismos en la red, o bien a través de la electricidad que genera la pila de combustible de hidrógeno. El depósito que monta el GLC F-Cell presentado en Frankfurt es capaz de albergar 4.4 kilos de este gas, y se recarga en unos 3 minutos.

Fotos: Phocarmedia

Este artículo trata sobre...

Pixel