Mercedes continuará apostando por los híbridos diésel

La unidad de la imagen fue cazada en pruebas con la nueva versión híbrida a bordo mientras realizaba pruebas del nuevo conjunto híbrido

Cuando la mayor parte de los fabricantes están cambiando su estrategia de hibridación pasando de motores diésel a bloques de gasolina -Volvo es el único fabricante que lo ofrece en el XC90 T8- es cuanto menos curioso que uno de los fabricantes referencia apueste por lo contrario.

Hasta hace pocos años, Mercedes contaba con sus versiones BLUETEC Hybrid que ha ido sustituyendo progresivamente por una nueva generación de híbridos con motores de gasolina. Pero según la marca de la estrella, el diésel tiene todavía un largo futuro por delante y más allá de 2025, año en el que estima que sólo el 25% de las unidades vendidas en todo el mundo serán eléctricos puros ya sea alimentados por pila de combustible o batería. El 75% restante mantendrá un motor de combustión interna, aunque sea híbrido, de gasolina o diésel, y ellos continuarán trabajando para que éstos sean más limpios aún.

La marca la estrella ha presentado en el Coloquio Anual sobre Tecnología del Automóvil que se celebra en Aachen, Alemania, un nuevo conjunto completamente escalable para ser montado desde la Clase C al Clase S y en cualquier tipo de carrocería, tomando como base el nuevo propulsor diésel de cuatro cilindros OM 654 con 2.0 litros y 194 CV de potencia máxima ofertado en el Clase E, tan cargado de tecnología que reduce las cifras de NOx en un 80% siguiendo el nuevo ciclo de mediciones WLTP en condiciones reales.

Detalle del nuevo motor diésel OM654 base del nuevo sistema híbrido que llegará en 2018

A este bloque diésel se le ha unido un motor eléctrico que proporcionará una potencia máxima de 122 CV y acoplado a la nueva transmisión automática de nueve velocidades 9G-Tronic, rindiendo una potencia máxima conjunta de 315 CV y un par motor máximo de 700 Nm. Comparado con el sistema anterior, el motor eléctrico no está conectado directamente a la transmisión sino a través de un convertidor de par, que además cuenta con un amortiguador para reducir las vibraciones del motor diésel junto con otro ubicado entre el propio bloque y la transmisión.

Con más detalle, el motor eléctrico utilizado es el mismo que en los híbridos con motor de gasolina -en los que rinde 90 kW- pero se ha rediseñado completamente para aumentar su potencia hasta 122 CV y ofrecer un par motor máximo e inmediato de 440 Nm, contando con una refrigeración propia.

Este nuevo motor eléctrico también hace de generador alimentando una nueva batería de ion litio que ofrece una capacidad de 13,5 kWh gracias a una nueva composición química de las celdas de la batería por lo que la autonomía en modo totalmente eléctrico llega hasta 50 kilómetros.

En comparación con la batería anterior, también ha experimentado una mejora importante en lo que a capacidad de carga se refiere, ya que se ha duplicado pasando de 3,6 kW a 7,2 kW por lo que el fabricante estima que podrá ser cargada por completo en menos de dos horas si se usa una conexión de 400V o en siete horas si se utiliza una corriente eléctrica doméstica de 220V.