El Gobierno alemán critica la estrategia de lujo de Mercedes, una apuesta con un importante problema detrás para la marca
La pasada primavera, Ola Källenius aprovechó la junta general de accionistas para anunciar una nueva estrategia en la marca alemana, más enfocada en el lujo. Las cifras de venta más elevadas de la división deportiva de AMG y de las de Maybach han hecho mella en el fabricante, una estrategia que no tiene un gran actor a su favor y que le puede acarrear consecuencias muy importantes.
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Publicado: 23/10/2023 15:00
«Somos una marca de lujo». Estas son las palabras recitadas por Ola Källenius, el gran jefe del grupo Daimler, ante los accionistas cuando el pasado mes de mayo les presentó las cuentas del año fiscal y la estrategia para los próximos años. Una estrategia en la que los coches eléctricos cobran cada vez más relevancia y peso, pero sobre todo los de verdadero lujo. El sueco llegó a esta decisión tras analizar profundamente las cifras de ventas de las tres divisiones de la marca, la de turismos y las ya desgajadas de AMG y Maybach.
Tanto las de la división deportiva como los del sello más lujoso explotaron el año pasado y los primeros meses de 2023, llegando a la conclusión de que cada vez hay más ricos en Europa, y dispuestos a desembolsar lo que la marca de la estrella considere que cuestan sus modelos, cargados de tecnología. Los estrategas de la marca alemana también han confirmado que el Clase G se desligará de la gama como una submarca más, por lo que la oferta quedará con cuatro compactos y los Clase C y Clase E por otro lado, además de potenciar la gama SUV.
¿Se equivoca Mercedes apostando estrictamente por el gran lujo?
Una estrategia que tiene más detractores de lo que la marca pensaba, primero por los clientes que verán un sueño inalcanzable el tener un Mercedes, pero también el del Gobierno alemán que ya se ha hecho notar. El Ministro de Transportes de Baden-Württemberg, Winfried Hermann, considera que esta estrategia de Mercedes de crecer con modelos de lujo y muy caros apuntando que «esta estrategia es un error y también generará problemas de aceptación si sólo se fabrican coches para los ricos y los superricos».
El mandatario no se ha quedado en este punto, comprende que lo los coches de lujo se vendan para obtener beneficios, pero entonces abandona el mercado de masas. «Los coches del segmento de lujo normalmente sólo son adecuados como coches de empresa o para personas con altos ingresos. De hecho, pensé que Mercedes había comprendido que necesitaban diversificarse más, también para preservar los puestos de trabajo». Hermann ve detrás de esta estrategia una invitación expresa para que los coches asiáticos se extiendan más por el continente, añadiendo que «La mayoría de los coches de Corea, China y Japón son más baratos que los de los fabricantes alemanes, pero ahora ofrecen un estándar similar».
El riesgo de Mercedes en las ayudas para desarrollar tecnologías
Unas palabras que no han debido de sentar muy bien en el seno de la marca de la estrella, pero también es cierto que Mercedes es una empresa privada y está en su derecho de trazar sus líneas de negocio como desee. Para Mercedes, es un importante riesgo el que corre con esta decisión pues, a la hora de necesitar ayudas gubernamentales para desarrollar coches eléctricos, el gobierno puede negarlas al considerar que no las necesita al obtener tantos ingresos.