El importante problema contra el que lucha Mercedes, y no son los microchips

Mercedes es una de las marcas que sufre un gran problema desde hace décadas. Al lado del que está ocasionando el de los microchips es nada, una verdadera lucha incansable que apenas da frutos, pues se reproduce como la pólvora. La marca de la estrella alberga departamentos desconocidos para una gran mayoría pero que trabaja casi en la sombra para evitar un gran daño comercial y de reputación: se trata de las falsificaciones de los recambios y los accesorios originales.

Expertos de Mercedes Group comprueban todos los registros de patentes y entidades de la propiedad intelectual para detectar los posibles fraudes. Y, a pesar de que se trata de una de las tareas más arduas, los resultados son apabullantes. En 2021, la marca logó confiscar más de 1,7 millones de componentes falsos con la estrella de tres puntas, nada menos que un seis por ciento más que el año anterior. El gran problema es que estas plataformas de ventas de componentes falsos emergen como la espuma, por lo que cada vez aparecen con mayor facilidad aumentando la piratería.

La piratería en Mercedes, una verdadera lucha sin cuartel

Los trabajadores de esta sección estudian al milímetro los «modus operandi» de las falsificaciones, apuntando especialmente a plataformas online de Asia, con un importante repunte en la actualidad de reproducciones que casi se pueden considerar obras maestras pero exentas completamente del estándar de calidad del fabricante. De hecho, una de las conclusiones de un estudio interno apunta que los dos años de la pandemia del Covid-19 supuso una verdadera explosión.

Lita Silje Janisch es la responsable de este departamento, señalando que «Si las falsificaciones llegan a manos de los clientes, puede ser realmente peligroso, especialmente con piezas relevantes para la seguridad». Y es que todo se falsifica porque lo original es más caro, desde spoiler a parrillas, faros, pilotos, llantas de aleación, amortiguadores, filtros y hasta las pastillas de freno.

Las claves de Mercedes para detectar las falsificaciones

Janisch recuerda un caso acontecido el pasado año, cuando el capó de un modelo de Mercedes se desplegó a 130 km/h y reventó el parabrisas. El propietario reclamó los daños a la marca, pero la investigación del concesionario reveló que había sustituido la parrilla por una no original, por lo que el cierre del capó no lograba encajar correctamente.

Los indicios para detectar las falsificaciones son sencillos. En algunos casos basta con ver las imágenes de los productos, en otros que el vendedor ofrezca productos de muchas marcas de coches. Pero hay uno que es clave: un precio extremadamente bajo comparado con el original. Ni Mercedes, ni ningún fabricante, da duros a cuatro pesetas.