MG sigue los pasos de BYD, busca fábrica para producir sus eléctricos en Europa, lo que las marcas locales no han visto venir en su ofensiva contra China

Hace unos años que las marcas de coches europeas buscaron emplazamientos de producción en otros países fuera del Viejo Continente para abaratar los costes de mano de obra, aunque es algo que no se notó mucho en el precio de los coches nuevos vendidos en Europa. En realidad, no se notó nada, solo que las marcas lo que hicieron fue diversificar los sitios de producción para aumentar las ventas y reducir los plazos de entrega.

Ahora, con los coches eléctricos, se ha dado la vuelta a la tortilla. Fabricar en el lejano Oriente sale más barato y hay unos cuantos miles de euros de diferencia entre un modelo europeo equivalente a otro asiático. Hoy, la situación se está tensando tanto, pidiendo aranceles e impuestos a los fabricantes asiáticos, que si la Unión Europea no actúa, causará un daño terriblemente grande a las marcas del Viejo Continente. Las situación se complica, pues también tensa las relaciones con el gigante asiático, por lo que las marcas orientales, conscientes del posible gran problema al que se enfrentan, se han sacado un as de la manga que nadie pensaba.

SAIC quiere fabricar en Europa los eléctricos de Morris Garage

Instalarse en Europa. Tesla ya dispone de una fábrica en Alemania y busca sitio para otra en el territorio europeo. BYD también, y está muy interesada en la planta de Ford en Saarlouis. La del óvalo azul está deseando de vender y la otra parte de comprar, y aunque no lo han hecho público, están en conversaciones para llegar a un buen puerto. La última en sumarse a esta iniciativa ha sido SAIC, la propietaria de la marca de Morris Garage que, con su MG4, ha conquistado al público europeo.

SAIC transporta las unidades de sus modelos eléctricos en barco hasta el puerto belga de Zeebrugge o el holandés de Rotterdam, fabricar en Europa evitará los temidos impuestos a las exportaciones, y poniendo aún más contra las cuerdas a los europeos, con una competitividad significativamente mayor, especialmente si son capaces de mantener los bajos costes de producción y la importante diferencia de precios.

BYD lucha también para producir en el Viejo Continente

El fabricante asiático, que mantiene alianzas con Volkswagen o General Motors en China, vendió más de 115.000 unidades en Europa durante el primer semestre del año pasado, un 70 por ciento de ellas de MG y otras cuantas de Maxus. A día de hoy, SAIC tiene claro que se va a instalar en Europa, cuanto antes mejor. Incluso un portavoz de la firma, del que no se conoce su identidad, ha señalado que «aún estamos discutiendo qué marca es la que se aprovechará de esta nueva fábrica europea». Una forma de desviar la atención, pero que vistos los resultados comerciales del MG4, no hace falta pensar mucho cuál será el beneficiado, a la vista de la gran competencia con el BYD Dolphin y el Volkswagen ID.3.