Opel apunta al regreso de un famoso modelo que será eléctrico y más pequeño que el Corsa

Hoy en día es imposible emprender las batallas en solitario. El mercado avanza muy deprisa, más que nunca, y la rápida evolución de la movilidad eléctrica obliga a las marcas ha formar alianzas y grandes conglomerados. El Grupo Stellantis es una de las mayores corporaciones del panorama internacional con 14 marcas diferentes bajo su paraguas. Opel forma parte de ella y gracias a eso puede disfrutar de una tecnología que por sí sola no podría ni siquiera soñar. Eso le permitirá ofrecer modelos únicos bajo sistemas compartidos.

Los alemanes están en pleno proceso de renovación de la flota. El Opel Astra ha sido el primero en ofrecer nuevas tecnologías basadas en el grupo. Junto a él, tirando del carro, está el Opel Corsa. El icónico utilitario lleva décadas a la venta siendo, durante gran parte de su vida comercial, el modelo más pequeño de la casa. Ha habido excepciones, como el Opel Adam. Un pequeño urbano perteneciente al segmento A que entre 2013 y 2019 se posicionó como el modelo de acceso a la familia. Su regreso está sobre la mesa.

Plataforma Smart Car con hasta 320 kilómetros de autonomía eléctrica

En este punto hay que mirar a otra gran compañía de Stellantis, Citroën. Los franceses han sido los primeros en adentrarse en el segmento de los eléctricos más baratos del mercado. Su rival más directo, por tamaño es el Dacia Spring. Lo conocimos hace unos días y desde entonces los rumores de posibles hermanos no han dejado de surgir. El Grupo Stellantis quiere democratizar la electromovilidad en el viejo continente y da carta blanca a sus marcas para poder usar la tecnología del pequeño Citroën ë-C3. Opel está muy interesada.

Obviamente, por sí mismo, este hecho no confirma el regreso del Adam a la familia alemana, pero sí demuestra que el Corsa ya no será el modelo más pequeño de la misma. Usará la plataforma Smart Car, una estructura derivada de la plataforma CMP que el conglomerado usa en mercados emergentes. Permite el acceso a mecánicas 100% eléctricas y a diferentes sistemas de combustión. Renaud Tourte, Director de la Plataforma Smart Car de Stellantis, ya ha confirmado que la arquitectura será usada por unos siete nuevos modelos.

Al igual que en el ë-C3, el objetivo de Opel es ofrecer un coche eléctrico de precio razonable, por debajo de los 25.000 euros, antes de ofertas, descuentos o ayudas procedentes del Plan MOVES III o del que esté activo cuando se lance al mercado. Con un tamaño contenido, el peso se mantendrá a ralla con materiales livianos y una batería de pequeña capacidad capaz de lograr amplios márgenes de autonomía. Hasta 320 kilómetros de autonomía, como bien demuestra el modelo francés. Por el momento no hay fechas confirmadas para su lanzamiento, ni nombre oficial, aunque todo apunta a que verá la luz en algún momento del 2025.

Paralelamente, el Grupo Stellantis trabaja en nuevos formatos de batería. Químicas avanzadas que buscan obtener grandes rendimientos y eficiencias con paquetes livianos y baratos de producir. El objetivo no es nada sencillo. A mediados de este año dieron un pequeño adelanto. Se combinará con una plataforma totalmente nueva, denominada IBIS, que sustituirá a la presente Smart Car. En ese caso sí se ha diseñado para modelos 100% eléctricos y se presentará antes de que acabe la presente década.

Fuente: Autocar