Mitsubishi se suma a la gran alianza japonesa para desarrollar coches eléctricos y combatir a la competencia china

El pasado mes de marzo, se dio a conocer el memorando de entendimiento (MOU) que marcaba el inicio de una alianza entre dos de los principales fabricantes de coches japoneses: Honda, el segundo, y Nissan, el tercero, se aliaron para trabajar conjuntamente en el desarrollo de nuevos coches eléctricos, software y otras aplicaciones.

Ahora, casi medio año después, Mitsubishi se apunta a la 'fiesta' para formar una alianza a tres bandas que consiga recortar distancias frente al poderío de las marcas chinas y de Tesla en el campo del vehículo eléctrico.

Y ya de parte, marcar una línea divisoria importante en el mercado japonés: Nissan, Honda y Mitsubishi, por un lado, y Toyota, Suzuki y Mazda, por el otro. Las alianzas son más vitales que nunca en el contexto actual al que se enfrenta el mercado automovilístico a razón del coche eléctrico.

«Si queremos aumentar nuestra competitividad, necesitamos aumentar el número de amigos que estén a nuestro lado", afirmó el director de Nissan, Makoto Uchida. "Esa es la dirección que está tomando la industria automovilística».

La nueva gran alianza a tres bandas en Japón

En un comunicado conjunto, se dieron a conocer algunos detalles de esta nueva alianza japonesa, que pone a Nissan, Honda y, ahora, a Mitsubishi, en situación para «debatir conjuntamente para una mayor inteligencia y electrificación de los automóviles, en previsión de la colaboración en áreas como tecnologías medioambientales, tecnologías de electrificación y desarrollo de software».

El fin último de las marcas japonesas es reducir su huella de carbono, y para ello no solo se debe realizar una apuesta por el vehículo eléctrico, sino ir más allá. «Es esencial crear nuevo valor mediante la integración de las tecnologías y el conocimiento cultivados por cada empresa».

Las tres firmas niponas acabarán compartiendo gastos de desarrollo de nuevas tecnologías y, como suele ser habitual en estos casos, compartir también tecnologías en las que se tenga una mayor especialización. En el caso de Mitsubishi, no cabe duda de que su gran fuerte está en la tecnología híbrida enchufable.

Los acuerdos que se alcancen permitirán a las tres compañías poder generar sinergias y nuevas oportunidades de negocio, así como competir en términos de escala de negocio y cadena de suministro.

Sin ir más lejos, Nissan y Honda ya se encuentran investigando un nuevo sistema operativo y software conjunto para coches eléctricos que debería llegar para después del año 2027. Se aprovecharán todas ellas de los acuerdos y posibles empresas conjuntas que se desarrollen en los próximos años, también en materia de baterías.

«Si las empresas no pueden hacer frente a las circunstancias, no sobrevivirán. Tenemos que actuar ahora o no podremos ponernos al día. Esta cooperación entre los tres será un arma poderosa», comentó Toshihiro Mibe, Presidente de Honda.

Las marcas chinas, en el punto de mira

Si miramos a las cifras del mercado automovilístico en el campo de la electrificación, resulta evidente ver cómo las marcas japonesas han perdido claramente el protagonismo frente a los fabricantes chinos y Tesla.

Sin ir más lejos, en 2023 BYD, principal fabricante de vehículos electrificados a nivel mundial, vendió 1,57 millones de coches eléctricos, por los 1,8 de Tesla, líder absoluto. Por su parte, Nissan apenas llegó a las 140.000 unidades y Honda a los 19.000 coches eléctricos vendidos a nivel global.