Motores de cuatro cilindros, dos litros y tres turbos de Volvo

La necesidad siempre ha sido el factor fundamental que ha llevado al hombre a evolucionar. Sin embargo aunque siempre ha habido algún tipo de necesidad, es en los últimos 50 años cuando se ha producido un salto evolutivo de proporciones desconocidas. En el mundo del motor ocurre lo mismo, la menor cantidad de combustibles fósiles y las exigentes normativas de emisiones está obligando a las marcas a exprimir los motores a niveles insospechados.

Los dos turbos tradicionales aportan el empuje a partir de un determinado régimen de giro

Hace algunos años, no muchos, era muy normal encontrarse con motores de dos litros que difícilmente superaban los 100 caballos de potencia, era una auténtica proeza técnica superar esa marca. Pero hoy en día el downsizing y el uso masivo de turbocompresores deja en ridículo aquella época, logrando potencias que solamente estaban reservadas a bloques de gran tamaño.

Todas y cada una de las marcas han tenido que unirse a este trenecito tan especial. Cada día más los compradores demandamos coches más eficientes, que consuman lo mínimo posible, ya que el precio de los carburantes se ha disparado en los últimos años. A nosotros se han sumado los diferentes organismos reguladores que obligan a las marcas a producir coches con un menor impacto medio ambiental.

Es por este motivo que Volvo, siempre especial en estos temas, ha desarrollado un nuevo motor, un prototipo por ahora que es capaz de exprimir 450 CV de un motor de cuatro cilindros y dos litros. Te preguntarás cómo es esto posible, pues la respuesta es muy sencilla, gracias a la utilización de turbocompresores, no uno ni dos, si no tres.

En cierta parte esto me recuerda un poco al Bugatti Veyron, cuando este hiperdeportivo llegó al mercado lo hizo con un total de cuatro turbos. Muchas manos fueron a la cabeza, alarmados por tal locura, pero parece ser que el tiempo les ha dado la razón. Olvidaros de los motores de aspiración natural, son historia, el empleo de los turbos es el futuro.

La complejidad de desarrollo de estos motores les hace por ahora ser muy caros

Sin embargo tampoco hay porque escandalizarse ni meterse debajo de las sábanas para llorar, es un paso hacia adelante y los ingenieros saben lo que se hacen. Si os acordáis hace no mucho Audi presentó el RS 5 TDI Concept. Se trataba de un modelo experimental que incorporaba por primera vez un turbo de accionamiento eléctrico.

Pues bien, Volvo ha usado este mismo procedimiento en sus motores Drive-E Concept Powertrain. A esos cuatro cilindros les ha sumado tres turbos, dos de ellos normales y uno de accionamiento eléctrico. Con esto se consigue eliminar el dichoso retraso de los compresores, haciendo la que la conducción recuerde más a un motor atmosférico, empuje inmediato.

Los beneficios de este sistema no se quedan ahí, ya que con esta tecnología también se puede incrementar la potencia de manera notable. Los ingenieros suecos anuncian con todo orgullo que estos motores no producirán menos de 450 caballos de potencia. Si esto es cierto, que no tenemos motivos para dudarlo, está claro que este es el futuro del automovilismo. Comienza la era del turbo eléctrico.

Los turbos tradicionales siguen manteniendo su forma, aunque son de un tamaño reducido