Salón de GinebraNanoFlowcell Quantino Concept, ¿la solución eléctrica viable?

El Quantino se aleja de la idea eléctrica que tenemos, pero se presenta como una solución viable

Actualmente tenemos dos ramas de eléctricos en el mercado. Por una parte están coches que emplean esta tecnología para alcanzar cotas de deportividad nunca vistas. Otra rama la representan los modelos convencionales que lejos de ser prácticos presentan un rendimiento discreto y una autonomía muy corta. Sin embargo el NanoFlowcell Quantino llega para unir ambos espectros.

El Salón de Ginebra 2015 ha acogido la presentación de este compacto, apenas 3,91 metros, que promete lo que ningún otro eléctrico es capaz de hacer, fijar su autonomía en los 1.000 kilómetros. La empresa, NanoFlowcell, afincada en Liechtenstein, asegura que su modelo es el futuro, y que su viabilidad es tan real que esperan que este mismo año sea homologado y empiece a rodar por las carreteras.

El Quantino es un eléctrico con pila de combustible, pero en lugar de usar hidrógeno emplea líquidos iónicos que ni son contaminantes ni explosivos. Estos se queman durante la circulación, impulsando motores eléctricos que se encargan del desplazamiento. Este concepto ya lo habíamos visto en su hermano mayor, el NanoFlowcell Quant F Concept, pero en una configuración más radical.

Sus 3,91 metros de longitud le permiten albergar hasta cuatro pasajeros en una configuración 2+2

Otra novedad que presenta es su sistema de baja tensión, tan solo 48 V. Con ella se logra crear una potencia de salida de 136 CV, una cifra muy real, que permitirá al Quantino recorrer una distancia de 1.000 kilómetros sin repostar con velocidades punta de 200 Km/h. Estas cifras avalan un proyecto realmente interesante. No se centra en el rendimiento puro, sino en ser capaz de lograr lo que cualquier coche convencional es capaz de hacer.

Bajo su carrocería se instalan dos depósitos de 175 litros, 350 en total. La marca asegura que el proceso de repostaje es exactamente igual que el que ahora realizamos. Los líquidos se separan por su carga, positivos y negativos. La única diferencia es que hay que llenar dos tanques en lugar de uno. Sin embargo ya te habrás dado cuenta del principal inconveniente: ¿de dónde sacamos los líquidos iónicos?

No debes olvidar que aunque NanoFLowcell pretende homologarlo este año, el Quantino seguirá siendo un prototipo, altamente avanzado, pero un prototipo. Sin embargo sirve para mostrarnos que esta tecnología es viable y ya se encuentra desarrollada. Es un punto de vista diferente del concepto actual que tenemos de los eléctricos, pero esperemos que realmente sea funcional para un uso común.

Lo realmente llamativo del Quantino, además del diseño, es el concepto clásico que tiene del coche