El NASCAR del Garaje 56 de Le Mans completa un primer test de 12 horas en Daytona

El Garaje 56 de La Sarthe tendrá un ilustre ocupante en las 24 Horas de Le Mans de 2023. Será un Chevrolet Camaro ZL1 Cup, un vehículo de NASCAR que tendrá el enorme desafío no sólo de tener un nivel competitivo aceptable, sino de mantener este nivel durante 24 horas, algo para lo que no está previsto un coche de estas características. Hendrick Motorsports, como equipo que soporta el proyecto, tiene un enorme trabajo por delante.

Todos los integrantes de este interesante proyecto lo saben, por lo que los test de desarrollo del vehículo para adaptarlo a las exigencias de Le Mans se van sucediendo a un ritmo alto. Y es que lejos de la presentación que se realizó durante las 24 Horas de Daytona para confirmar que Jenson Button, Mike Rockenfeller y Jimmie Johnson serán los pilotos de este NASCAR, el circuito situado en Florida se ha convertido en epicentro de este proyecto.

«Tras este test vamos a ir a Sebring y nuestro objetivo es correr entre 18 y 24 horas seguidas»

El esfuerzo liderado por Hendrick Motorsports ha rodado en Daytona durante esta semana para completar dos días de pruebas con el Chevrolet Camaro ZL1. Dos días de test en los que la estructura ha completado una prueba continúa de 12 horas como primer paso en su camino hacia Le Mans. En el equipo saben que todavía están lejos de los objetivos, pero esperan que esta prueba de resistencia sirva para ampliar los test de larga duración en próximas fechas.

Además de este test de 12 horas, la sesión de pruebas en el circuito de Daytona ha servido para que Jenson Button haya dado sus primeras vueltas con el Chevrolet Camaro ZL1. Jimmie Johnson y Mike Rockenfeller también han estado presente, asumiendo gran parte del trabajo, así como un Jordan Taylor, piloto de Corvette Racing, que en teoría va a hacer la funciones de piloto reserva, incluso si compite con su marca en La Sarthe.

2.000 millas

Chad Knaus, vicepresidente de Hendrick Motorsports, ha analizado la prueba del equipo en Daytona: «Teníamos un montón de cosas de configuración por probar. Desde el punto de vista de diseño general, creo que estamos bastante cerca de lo que queremos del coche. Tenemos que trazar una línea en la arena en algún momento y creo que estamos en ese punto. Tras este test vamos a ir a Sebring y nuestro objetivo es correr entre 18 y 24 horas seguidas».

«Si conseguimos hacer un test de más de 18 horas seguidas en Sebring es que nos estamos acercando bastante a nuestros objetivos. Compartiremos la pista con otros vehículos allí, por lo que será bueno para nosotros a la hora de comprobar nuestro nivel y la dinámica del coche una vez que adelantamos y nos adelantan» ha añadido un Knaus que ha asegurado además que el NASCAR Garage 56 ha completado unas 2.000 millas de pruebas.

Tocando a lluvia

Uno de los puntos curiosos hasta ahora es que el Chevrolet Camaro ZL1 se ha encontrado pista mojada en cada test hasta Daytona: «En cada prueba que hemos estado, hemos tenido un día de lluvia. Lo que, para mí, desde mi perspectiva en NASCAR, sería una mierda, ahora nos viene genial. Nuestros socios de Goodyear han tenido una gran oportunidad de aprender todo lo que necesitan y lo que le gusta y no le gusta al coche cuando se mueve sobre pista mojada».

Más allá de este punto, todavía es muy pronto para determinar el nivel de rendimiento que puede tener este NASCAR en La Sarthe. Con todo, el sentir general dentro del proyecto es que se completaría un buen papel en Le Mans si el Chevrolet Camaro ZL1 es capaz de rodar en tiempos cercanos a los GTE, aunque cualquier objetivo todavía no está definido. Y es que el proceso de adaptación de este coche continúa.

Fotos: NASCAR GR56