Neumáticos de invierno: por qué deberías plantearte su compra
Con la llegada del invierno, debemos adaptar nuestro vehículo y hábitos a las adversas condiciones meteorológicas. Los neumáticos de invierno son una muy buena opción, pero debemos saber bien cómo sacarles partido.
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Publicado: 26/11/2021 09:30
Con el invierno llega la escasez de horas de luz diurna, las bajas temperaturas, las lluvias, las heladas e incluso la nieve y el hielo. Todo ello afecta a la conducción y, como responsables de nuestro vehículo, debemos ser conscientes de todo lo que esto conlleva.
En otros artículos prácticos hemos hablado de cómo conducir de noche o con lluvia, así como el mejor modo de elegir las cadenas de nieve más adecuadas o la manera de actuar ante una nevada o placas de hielo en la carretera.
En esta ocasión vamos a hablar de los neumáticos de invierno como alternativa más que recomendable a las cadenas. ¿Quieres saber cuáles son sus características y por qué pueden ser tu mejor opción? Acompáñanos y responderemos a todas tus preguntas.
Qué tienen de especial los neumáticos de invierno
Los neumáticos de invierno están específicamente concebidos para circular con temperaturas inferiores a los 7 ºC, tanto si la carretera por la que lo hacemos tiene nieve y/o hielo como si no. Esto es lo que los diferencia principalmente de las cadenas y hace que sean mucho más cómodos en todas las circunstancias.
Pero claro, puede surgirte la duda de si llevar un neumático de invierno es a todas luces comparable a las cadenas, tanto a nivel de eficiencia como en lo que a legalidad respecta. Y es que, cuando la DGT decreta el nivel rojo en una vía, se hace obligado circular con ellas.
Bien, la ley establece que los neumáticos homologados de invierno son equiparables a las cadenas de nieve, por lo que el usuario puede circular por tramos ‘rojos’ (cubiertos de nieve) del mismo modo o incluso mejor que con cadenas. ya que dichos neumáticos permiten rodar sin riesgo a averías o deformaciones provocadas por los eslabones metálicos (aunque hay otros tipos de cadenas, claro está). Por tanto, los neumáticos de invierno son perfectamente válidos y además no obligan al conductor a parar en la cuneta para instalar cadenas.
Su construcción se basa en un dibujo específico para las condiciones extremas del invierno, así como materiales que se adaptan al frío y responden mucho mejor que los neumáticos de verano, que por debajo de los 7 ºC se endurecen y pierden mucho agarre.
Ya sea en suelos secos, húmedos, nevados o helados, el caucho flexible de los neumáticos de invierno, junto con las bandas de rodadura profundas, garantizan un mejor agarre a la superficie. De este modo, se optimiza la maniobrabilidad y el manejo del vehículo en carretera y se reduce la distancia de frenado.
Cómo saber si un neumático es de invierno
Lo primero que nos indica que un neumático es de invierno es la señalización situada en el flanco exterior del mismo. Se trata de la inscripción M+S (Mud+Snow), que indica que dicho neumático ha sido homologado como neumático de invierno.
Además, los neumáticos de invierno tienen un diseño y composición diferente. Michelin, una de las marcas con mayor tradición en este tipo de producto, señala algunas de ellas:
- Muchas más laminillas o cortes en la banda de rodadura
- Laminillas autoblocantes tipo 3D en toda la profundidad de la banda de rodadura, que mejoran la maniobrabilidad al circular por carreteras secas
- 10 % más de profundidad de la banda de rodadura del neumático, lo que proporciona flexibilidad en carreteras resbaladizas
- Flancos más elásticos para incrementar la superficie de contacto y el agarre.
Qué es el neumático de invierno 3PMSF
Dentro de la categoría de neumáticos de invierno, existe otra más avanzada y que ofrece mejores prestaciones. Es la denominada 3 Peak mountain Snow Flake (3PMSF) y se indica con el icono de una montaña con un copo de nieve en el interior acompañando a la denominación M+S.
Este tipo de neumático de invierno está homologado en laboratorio certificado según un reglamento normalizado que garantiza que ofrece las prestaciones necesarias para circular sobre nieve.
Qué pasa si uso el neumático de invierno en verano
Al ser neumáticos específicamente diseñados para rendir en condiciones extremas, el caucho que los compone y el diseño utilizado provocan que con temperaturas cálidas se deterioren con rapidez.
Además, no ofrecerán las mismas prestaciones, ya que son más flexibles, lo que afectará a su comportamiento ante cargas longitudinales (frenada, tracción) y laterales (curvas). En definitiva, los neumáticos de invierno sólo serán útiles por debajo de los 7 ºC, es decir, en invierno. Lo mejor es montarlos en octubre o noviembre y volver a quitarlos en marzo, cuando las temperaturas suben de los 12 ºC.
A grandes rasgos, los neumáticos de invierno en verano provocan:
- Mayor distancia de frenado, puede llegar a ser el doble.
- Mayor desgaste (y ten en cuenta que suelen ser un 10% más caros.
- Menor eficacia (generación de graining por encima de 30 ºC).
- Menor velocidad máxima y mayor consumo (mayor resistencia a la rodadura).
Diferencias con neumáticos de nieve y los All Season
El neumático All Season o todo tiempo está diseñado para responder adecuadamente a todo tipo de condiciones. A diferencia del neumático de verano, es capaz de ofrecer un buen rendimiento en invierno. Y, a diferencia del neumático de invierno, resiste bien las altas temperaturas.
Eso sí, no todos los neumáticos All Season están homologados para sustituir a las cadenas (debemos asegurarnos de que lleven las siglas M+S) y, en caso de que la calzada tenga abundante nieve o hielo, deberemos montarlas para asegurarnos de circular con seguridad y, de paso, no ser multados.
Como puedes imaginar, este tipo de neumático se encuentra en un punto intermedio en relación a los de verano e invierno. El caucho es más blando que el de verano, pero resiste bien el calor y el asfalto seco, si bien no será tan duradero. Además, cuenta con un dibujo más complejo, con más laminillas y profundidad, lo que le hace mejor neumático que el de verano en condiciones de lluvia o agarre precario, aunque sin llegar a la especialización y efectividad del M+S y el 3PMSF de invierno.
La ventaja principal del neumático All Season es que no es necesario cambiarlo en función de la estación, ofreciendo un rendimiento equilibrado durante los 12 meses del año. Si además tiene la homologación M+S, tendrás la seguridad de no necesitar nada más para circular con tu vehículo. Eso sí, en función del modelo puede haber considerables diferencias en cuanto a duración, ya que esto dependerá mucho del tipo de caucho, el dibujo de la banda de rodadura y la flexibilidad de la carcasa.
Ya lo sabes todo sobre los neumáticos de invierno, ¿crees que deberías comprarlos para tu coche? Sin duda se trata de una elección a considerar si vives en zonas de nieve habitual en invierno o temperaturas muy bajas con abundantes heladas.