Nissan y Renault revisarán los términos del acuerdo de la Alianza
La salida precipitada de Carlos Ghosn al frente de la Alianza pretender sentar las bases de una nueva estrategia. Los responsables de Nissan estiman medidas para evitar futuros casos de corrupción, además de considerar un replanteo de la posición de Mitsubishi en la toma de decisiones con Renault, hoy favorable a los franceses y lo contrario en el caso de Nissan que aporta mayores ingresos.
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Publicado: 27/11/2018 15:00
El mazazo que el grupo franco-japonés ha recibido en los últimos días con el despido flagrante y por la puerta de atrás de Carlos Ghosn ha puesto a la primera marca japonesa en pie de guerra, transmitiendo a los franceses su deseo de revisar los términos de la alianza, ahora que el máximo mandatario está fuera del conglomerado.
La primera medida que los nipones van a plantear es eliminar la concentración de poder en una sola persona para que no se vuelva a repetir tan vergonzosa situación, como lo ha calificado el consejo de dirección de Nissan que, junto a Mitsubishi, han decidido fulminar a Ghosh, mientras que en Renault continúa figurando como CEO, a pesar de que Thierry Bolloré figura como interino en el cargo.
Y es que el gigante francés del Rombo ha abierto una investigación interna para aclarar si el máximo mandatario brasileño, que ha rechazado los cargos que le imputa el fiscal japonés, malversó activos en Renault o no, por lo que el resultado de esta investigación determinará si procede que la marca francesa se sume o no a las decisiones adoptadas por las otras dos partes de la triple alianza.
La agencia de noticias japonesa Kyodo ha avanzado la información, pero no se quedaría solo en ese punto. El siguiente es, cuanto menos, casi más interesante. Aunque la marca nipona ha apuntado que "La estructura de capital de la alianza de Nissan, Renault y Mitsubishi nunca había sido un problema", parece que estiman es el momento para revisar los términos del marco de la alianza después de 20 años, al entender que se encuentran en una posición desfavorable.
Y es que Renault cuenta con el 43,4 por ciento del capital de Nissan y el 34 por ciento de Mitsubishi teniendo voz y voto en las decisiones que afecten a Nissan, pero no a la inversa, dado que los japoneses solo disponen de una participación del 15 por ciento en la compañía francesa. Indudablemente, el acuerdo favorece a los franceses, a pesar de que en los últimos años Nissan contribuyó con casi un 50 por ciento de los ingresos netos a las cuentas de Renault.
Rumores apuntan que los pilares que sostienen la alianza se tambalean
El diario británico Financial Times apunta que, en los últimos meses, Carlos Ghson trabajaba más que nunca en una fusión entre Nissan y Renault que habría convertido a los dos fabricantes en un serio competidor para el gigante alemán de Volkswagen, llevándose toda la experiencia de Mitsubishi en el campo de la tecnología 4x4, en la electrificación y con el plus añadido de Dacia, la marca de bajo coste tan ansiada por los alemanes que nunca se materializó.
Las probabilidades de que este acontecimiento ocurra con Ghosn fuera de la empresa cada vez son menores y, según analistas, todo lo contrario de que la alianza se rompa. Los responsables de Mitsubishi dudan de que los nuevos gestores sean capaces de dirigir a las tres marcas como lo habían hecho hasta ahora, como ha apuntado Osamu Masuko, responsable de la marca de los tres diamantes: "No creo que haya nadie en todo el mundo como Ghosn que pueda conducir Renault, Nissan y Mitsubishi".