La red comercial de Dacia se renueva al completo en el mejor momento de su historia
Dacia sigue creciendo como marca. La cuota de mercado entre particulares alcanza su pico máximo gracias a dos años de intensa actividad. Ahora, la red comercial completa una transformación que resultará esencial para mantener el estado de gracia.
8 min. lectura
Publicado: 12/09/2023 16:00
Dacia ha dejado de ser esa marca low-cost poco atractiva y sin apenas presencia en nuestro país. En apenas dos décadas, el fabricante rumano ha conseguido establecerse como una de las piezas fundamentales del mercado a nivel nacional y europeo. En Europa registra ventas récord, situándose como la marca en muchos países, entre ellos Francia y Portugal. En España la situación es casi igual. El crecimiento ha sido notable en los dos últimos años, con un lavado de imagen fundamental. Ahora esa misma filosofía se aplica a la red comercial cargada de atractivas novedades.
La fachada de un concesionario es la fachada de una marca. No podemos negar que hace unos años, la red de Dacia era más sobria y sencilla de lo que debería. Aún así, la gama de productos ha conseguido situar a la marca entre las mejor valoradas de todo el Viejo Continente. Coches sencillos, pero atractivos. Coches que ofrecen todo lo que un conductor pueda necesitar. Coches que buscan sobre todo un precio de venta atractivo y equilibrado. Dacia ha conseguido democratizar la compra de un coche nuevo.
Y eso lo ha hecho en apenas 20 años. En 2004 el Dacia Logan fue el primer coche que la marca de Renault puso a la venta en nuestro país. Aunque no podía situarse a la altura de coches similares de la época, el Logan se convirtió en un éxito porque permitió a muchos conductores comprarse cumplir el sueño de tener un coche nuevo. Tras él han llegado más unidades a la familia: Sandero, Duster, Spring y ahora Jogger. Todos ellos han triunfado en cada uno de sus respectivos segmentos.
Muchos aseguran que Dacia es la marca más comprometida ante la aparición de los fabricantes chinos, pero los datos desmontan esa teoría. En la actualidad, en términos puramente numéricos, Dacia está viviendo el momento más dulce de su historia con una cuota de mercado entre particulares del 9%. En apenas un año y medio la tasa ha crecido un 1,5%. Y es que en los últimos dos años la actividad de la compañía ha sido frenética. Comenzó antes, antes de la pandemia, cuando se presentó en sociedad el nuevo Dacia Sandero. Tras él han llegado momentos importantes, como el cambio de imagen de toda la flota a mediados del año pasado.
Esa nueva librea se instala ahora en los puntos de venta repartidos por toda España. Actualmente, Dacia cuenta con más de 600 concesionarios, 200 son considerados como grandes instalaciones, mientras que otros 400 centros tienen un carácter más simple y pequeño donde apenas hay un par de vehículos a la venta. Renault-Dacia puede presumir de tener la red con mayor cobertura, cubriendo la casi totalidad de los territorios. El centro de Avenida de Burgos 93, en Madrid, ha sido el primero de todos ellos en completar el cambio de imagen. Pronto, antes de final de año, le seguirán el resto de grandes centros.
Una vez más insistimos en que hay que abandonar esa asociación de conceptos entre Dacia y marca low-cost. Un hecho que demuestra este nuevo rumbo es que Dacia crece ampliamente en zonas de grandes ciudades. Históricamente, la empresa ha tenido mucha representación en zonas rurales, pero las nuevas normativas de circulación, incluyendo las cada vez más importantes pegatinas medioambientales, han cambiado la mentalidad de la gente. Si buscamos etiquetas favorables no las hay más baratas que las de Dacia, tanto en versiones híbridas, de gas y 100% eléctricas. Una flota muy completa.
Los nuevos centros tienen el duro trabajo de seguir con el excelente ritmo marcado. Dacia asegura que ha centrado la renovación en una mejora de experiencia para los clientes. Centros más abiertos y modernos donde la transparencia será total. La nueva imagen se aplica no sólo en el logo, sino en cada concepto de los stand. Con todo ello, Dacia seguirá luchando por seguir siendo una de las marcas mejor valoradas en la relación valor-precio. Seguirá centrándose en lo esencial, pero aplicará el mismo toque moderno que ya han recibido sus coches.
¿Qué pasará en el futuro?
Si ya hemos dicho que los dos últimos años han sido muy intensos en cuanto a actividad, no menos activos serán los cursos siguientes. Dacia tiene una hoja de ruta clara e importante. El Jogger y el Spring 65 han sido las últimas unidades en sumarse a la familia, pero pronto habrá más. Una de ellas será la esperada renovación, completa, del Dacia Duster. El SUV compacto cambiará su imagen por completo, haciéndose más atractivo y musculoso. Mantendrá la filosofía de la casa, pero mejorará en todo lo demás. La nueva plataforma le permitirá disfrutar de más equipamiento y de un comportamiento más refinado.
Como no hay dos sin tres, la oferta SUV de la marca rumana crecerá aún más a partir del año que viene. Por primera vez en su historia Dacia atacará el sector más grande de los todocaminos compactos. El Dacia Bigster fue confirmado el año pasado. Será grande, será espacioso y también será híbrido. La oferta mecánica contará con numerosas posibilidades, así como diferentes configuraciones para un interior que podrá albergar hasta siete pasajeros. Dacia espera que, al igual que el resto de la gama, se convierta en un éxito, aunque su precio ya no será tan atractivo como estábamos acostumbrados.