Nuevo rol para Alex Wurz en Toyota Gazoo Racing

Alex Wurz colgó el casco a los 41 años tras conseguir su último podio en las 6 Horas de Bahrein, pero seguirá ligado al Mundial de Resistencia y a la formación con la que ha competido en las últimas cuatro temporadas en el WEC. El ex piloto austriaco seguirá dos años más en Toyota Gazoo Racing y aunque ya no se subirá en el LMP1 de la marca, si tendrá un papel importante dentro del proyecto. Alex Wurz ejercerá de Consejero y Embajador de Toyota, con el objetivo de promocionar el proyecto deportivo de la firma nipona.

Alex Wurz ayudará a al desarrollo del equipo y de sus pilotos, además de promocionar la tecnología híbrida del LMP1 de Toyota fuera y dentro de las pistas. Una labor que ya ejerció como piloto, pero que ahora acometerá desde un ámbito más formal. No será la única tarea de Alex Wurz asociada al mundo de las carreras, puesto que seguirá colaborando con la Asociación de Pilotos de Grandes Premios de la Fórmula 1. También realizará labores de diseño, trabajará en mejorar las medidas de seguridad y en la formación de otros pilotos.

Este anuncio no hace más que certificar el importante papel de Alex Wurz en el seno de Toyota Gazoo Racing. El austriaco fue el primer piloto confirmado a finales de 2011 para el proyecto en el WEC de Toyota, siendo junto a Nicolas Lapierre el primer piloto en conseguir una victoria con el Toyota TS030 Hybrid. Fue en las 6 Horas de Sao Paulo. También ejerció un papel muy importante en el título de constructores sumado por Toyota en el Mundial de Resistencia de 2014. A los mandos de las distintas versiones del LMP1 de Toyota ha sumado cinco victorias y doce podios.

Alex Wurz afirmaba tras el anuncio: "Siempre he tenido la intención de no desligarme de los deportes del motor una vez que mi carrera deportiva finalizase. Estoy muy contento de comenzar un nuevo capítulo en mi vida con Toyota. Hemos experimentado muchas cosas juntos desde el inicio de este proyecto y es emocionante ser parte del futuro del equipo". Mirando al futuro, el austriaco cree que: "Con un coche nuevo que llega en 2016 y con el WEC yendo cada vez mejor, hay que sentirse satisfechos mientras luchamos para recuperar nuestro lugar en lo más alto del campeonato".