Page-Roberts Automotive presenta las baterías verticales en coches eléctricos
Los fabricantes buscan soluciones para aumentar la autonomía de sus coches eléctricos sin sacrificar espacio interior, y sin aumentar el peso de la batería por una mayor capacidad energética. Hoy, la solución es ocupar el espacio entre los ejes, pero los de Page-Roberts Automotive apuesta por un nuevo concepto, baterías verticales.
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Publicado: 06/06/2021 20:00
Cada vez son más los fabricantes que están apostando por plataformas tipo patineta para su nueva hornada de coches eléctricos. Arquitecturas perfectamente modulares y escalables que se adaptan a cualquier tipo de modelo y carrocería. Prácticamente no hay límite en el desarrollo situando la batería entre los ejes, por lo que aumenta el espacio interior, aprovechado al máximo.
Una tecnología que ha descartado las plataformas adaptadas, que aprovechaban hasta el túnel de transmisión para alojar baterías. El gran problema es la autonomía, que viene condicionada por la mayor capacidad de las baterías, por lo que estas crecen en tamaño. Solucionar este problema pasa por una nueva generación de dispositivos de carga, las de estado sólido, pero su precio es muy elevado. La propuesta de Page-Roberts Automotive, una start-up británica, es cuanto menos curiosa, y una transformación radical del habitáculo.
Las baterías verticales, una solución a los problemas de autonomía
Algo que muchos fabricantes no estarán de acuerdo, y clientes tampoco. Los británicos se han sacado de la manga las baterías verticales dispuestas en un muro mamparo que separa literalmente la parte delantera y trasera del habitáculo, por lo que la segunda fila de asientos estaría orientada en sentido opuesto a la conducción, aprovechando como respaldo la pared de la batería. La start-up apunta que es una solución que aumenta la autonomía en un 30%, reduciendo el coste de producción de un coche eléctrico en un 36%.
El CEO de Page-Roberts, Freddy Page-Roberts ha explicado que «La disposición del monopatín se ha convertido en el pilar de la mayoría de los vehículos eléctricos. Pero esto da como resultado vehículos más altos con mayores pérdidas aerodinámicas y consumo de energía (especialmente a velocidades de autopista), una estructura adicional necesaria para proteger contra impactos y una distancia entre ejes más larga para compensar la batería. El aumento de tamaño y peso inhibe drásticamente la autonomía. Simplemente moviendo la ubicación del paquete de baterías, hemos encontrado una solución mucho más eficiente».
Aunque la firma apunta estas ventajas para ciertos modelos como deportivos, existen factores en contra que los responsables no han aclarado. Por ejemplo, el sistema de refrigeración normalmente se ubica debajo de la batería, al igual que tampoco se ha hablado de la célula de seguridad que protege la batería. Una solución ingeniosa que también obliga a cambiar radicalmente el diseño de los interiores, por lo que la modularidad que se vende quedaría de lado.