Peajes en Portugal, la guía definitiva
Mientras que en España la red de carreteras de peaje no está muy extendida, países como Portugal están más que acostumbrados. Eso puede llegar a provocar cierta confusión que desde aquí vamos a controlar gracias a esta guía todo sobre los peajes en Portugal.
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Publicado: 02/04/2020 14:00
Las carreteras de peaje son vías alternativas a los grandes nervios de circulación por las que pagamos por su uso. En nuestro país el uso de carreteras de peaje está parcialmente extendido, pero en otros países como nuestra vecina Portugal el uso es mucho más mayoritario. Esto provoca una serie de problemas y confusiones cuando circulamos por vías lusitanas. Pero tranquilos, que desde aquí os traemos la guía definitiva para entender los peajes de Portugal.
Lo primero que hay que decir es que aunque Portugal disponga de una amplia red de carreteras de pago, solo representa una fracción de la extensa red de todo el país. La mayoría de carreteras de nuestros vecinos son de uso libre, como aquí, pero a diferencia de España, las grandes redes de comunicación exigen un pago por uso. Un pago que en función de dónde nos encontremos debe realizarse de una u otra manera, y he ahí el foco de mayor confusión cuando nos adentramos en carreteras portuguesas.
Peajes en Portugal, ¿qué tipos hay?
En España estamos acostumbrados al sistema de pago manual. Es decir, a la entrada de una carretera de peaje recogemos un ticket que nos servirá para pagar a la salida de la misma vía. En su defecto la entrada puede ser libre pero la salida no. Este último sistema se usa para vías, generalmente autopistas, donde no hay salidas intermedias, es decir es una tarifa única de principio a fin. Una vez sabido esto veamos qué tipos de peajes hay en Portugal.
Peaje manual: Al igual que en España, nuestros vecinos del oeste también disponen de una red de carreteras de peajes tradicional. Al igual que aquí basta con recoger el ticket a la entrada y pagar a la salida. Para aligerar la velocidad de paso por las cabinas también se pueden usar los dispositivos VIA-T que hay en España. Al estar asociado el pago directamente a una tarjeta de crédito el paso por la cabina de peaje se realiza con toda sencillez y agilidad. Reconoceremos fácilmente estos carriles especiales por la pintura verde del suelo que los localiza.
Peaje electrónico: Es aquí donde la cosa se complica. Nuestros queridos vecinos, en aras de hacer más fluido el desplazamiento y el pago por sus carreteras, han extendido el uso de peajes electrónicos. Una red de arcos instalados a lo largo de este tipo de vías leen de forma constante la matrícula de nuestro coche para así ir procediendo con el cargo automático cada vez que pasemos por uno. Ahora bien existen diferentes formas de pago en este tipo de peajes.
Easy Toll
Se trata de una solución de pago automático que asocia una tarjeta bancaria a una matrícula. Para darnos de alta en este sistema tendremos que parar en alguno de los puestos de bienvenida que existen en las carreteras de peaje electrónico, perfectamente identificados y señalados. En ellos tendremos que adherirnos a este sistema de pago. Además de los costes relacionados con los peajes que vayamos cruzando hay costes secundarios por alta, 074 € y por administración, 0,32 €. A la hora de darnos de alta nos darán un comprobante que tendrá una validez de 30 días y que deberá ser conservado.
Sin lugar a dudas es el sistema más rápido y sencillo de todos ya que solo tendremos que hacer la gestión una sola vez y el pago se hará de forma electrónica en todas las vías con este tipo de peajes. El inconveniente es que no hay muchos puestos donde realizar dicha gestión. Los detallamos a continuación:
- A28 – Estación de Servicio de Viana do Castelo
- A24 - a 3,5 km de la frontera Chaves/Verin
- A25 – Estación de Servicio de Alto de Leomil
- A22 – Junto a la frontera Castro Marim / Ayamonte
- A28 - Viana do Castelo
- A25 – Área de servicio de Alto de Leomil (Vilar Formoso)
- A22 – Vila Real de Santo António
Tollservice
Pasamos a sistemas de pago con tarjeta de prepago. Dentro de esta modalidad encontramos a su vez dos soluciones. Una tarjeta precargada para un uso ilimitado durante tres días a un coste de 20 € que está exclusivamente reservada a los vehículos de clase 1 y 2. O también podemos optar por una tarjeta prepago por un recorrido específico y definido y cuyo coste variará en función del recorrido que vayamos a hacer.
Para adquirir estas tarjetas podemos hacerlo mediante dos vías. La primera es de forma virtual a través de la web específica, o bien en los diferentes puntos de venta habilitados para ello, como por ejemplo los aeropuertos de Oporto o Faro o las oficinas de correos. Sin lugar a dudas la forma más cómoda y segura es a través de la web ya que el proceso es más claro.
Tollcard
Al igual que el sistema Tollservice, hablamos de un producto de prepago. Se trata de una tarjeta precargada con valores que oscilan entre los 5 y los 40 euros. Será el propio usuario el que decida cuánto cargar. Una vez más el proceso podremos hacerlo a través de la página de Tollcard, o bien en algunas estaciones de servicio o puestos de correos. Este sistema de pago está exclusivamente limitado a las vías con peajes eléctricos. Es decir que si circulamos por una carretera de peaje manual tendremos que abonar la cantidad correspondiente.
Para que el usuario esté informado de cuánto saldo le queda en la tarjeta de prepago, es recomendable asociar el proceso con un teléfono móvil. La propia red de carreteras nos informará de cuánto saldo tenemos en la tarjeta, alertándonos cuando éste llegue a su fin. Una vez se nos acabe el presupuesto podemos volver a cargarla al instante accediendo una vez más a la web y pagando una vez más el saldo que queramos.
Vía Verde
En este caso centralizamos todos los problemas en un solo formato. Se trata del dispositivo temporal Vía Verde y es apto tanto para los peajes electrónicos como para los peajes manuales. Básicamente hablamos de un dispositivo VIA-T de carácter temporal. Se contrata exclusivamente a través de la web de Vía Verde. Existen tres modalidades diferentes: uso frecuente, uso ocasional y compra. En función de nuestras necesidades podremos optar por una u otra solución y asociarla a nuestra tarjeta bancaria. La empresa nos mandará el dispositivo correspondiente que tendremos que pegar en el parabrisas de nuestro coche y así despreocuparnos de todo. Cada vez que pasemos un peaje el cobro se hará de forma automática sin más molestias.
¿Qué pasa si no contrato ninguno de estos servicios?
Hasta hace unos años el Gobierno portugués era un poco libertino a la hora de multar a coches extranjeros que no usaban ninguno de los dispositivos especiales para las vías de pago electrónico. Sin embargo en los últimos tiempos las exigencias se han hecho mucho mayores y a día de hoy si no pagamos la correspondiente factura de pago por uso recibiremos en nuestra casa una multa.
Pero antes de que eso pase tenemos un cierto margen de tiempo para pagar antes de que las empresas que gestionan las carreteras de peaje se pongan en contacto con nosotros. La única solución viable será localizar las carreteras por las que hemos pasado y hacer el pago telemático desde casa mediante un cargo a la tarjeta bancaria. El problema es que hay varias empresas encargadas de la gestión de las vías de peaje electrónico en Portugal, así que tendremos que ver qué empresa corresponde a las carreteras que hemos pasado sin pagar. Estas son las tres empresas que se encargan de esa gestión:
Sabemos que todo esto es un poco complicado. En lugar de optar por una solución única los peajes en Portugal pueden suponer un verdadero quebradero de cabeza. Por norma general no sabemos qué precio tienen los peajes hasta que no pagamos por ellos, pero para hacer más sencillo el proceso la red de carreteras de peaje portuguesas ha creado una sencilla calculadora con la cual podremos estimar el gasto en peajes que tendremos en nuestro viaje. Lo podremos calcular a través de la web destinada a ello.