Pebble Beach 2017: los clásicos más caros de las subastas de Monterey
Las subastas que acompañaron esta edición de los eventos de la Monterey Car Week no defraudaron, logrando varios e impresionantes récords absolutos en muchos casos. Este es el top ten de los deportivos clásicos vendidos estos días en Pebble Beach.
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Publicado: 22/08/2017 12:00
A pesar de que durante toda la semana se celebran docenas de actos y eventos en la península de Monterey, las subastas que tienen lugar esos días son los que acaparan más portadas. No en vano, el Pebble Beach Concours d’Elegance es una de las citas más importantes del calendario internacional, por lo que es habitual que nos encontremos con muchas de las piezas más exquisitas, y caras, del año.
Esta edición 2017 no fue menos, por lo que todas las casas que tenían programada una subasta, que no fueron pocas, presumieron de los mejores catálogos del año. Las más destacadas fueron, como es habitual, las grandes firmas de subastas, Mecum Auctions, RM Sotheby’s, Gooding and Company y Bonhams. De los cientos de modelos subastados estos días, estas cuatro casas prácticamente monopolizan la lista de los 100 modelos más caros, aunque en el caso de la estadounidense, no logró poner este año ninguno de sus lotes entre los 10 primeros.
Como podemos ver en la lista inferior, la marca que se llevó más puestos fue, como suele ser habitual, la italiana Ferrari, con nada menos que 5 de los 10 modelos más caros, sin embargo, curiosamente los mayores honores no recayeron sobre la firma de Maranello, ya que este año, el de su 70 aniversario, muchos de los Ferrari más espectaculares los pudimos encontrar en la impresionante colección de modelos, setenta en total, que la italiana logró reunir a modo de exhibición. Una impresionante caravana que sumaba unos 500 millones de dólares, con modelos tan raros como el Ferrari SP275RW Competizione o el Ferrari Enzo FXX Evoluzione.
El ganador y con diferencia fue el Aston Martin DBR1 de 1956, que con una asombrosa puja de 22.550.000 dólares se convertía no solo en el modelo más caro de la marca, sino también en el modelo británico má caro de la historia. Este ejemplar cuenta con un excelente historial y estado original, pero su mayor argumento era ser el primero de los solo 5 bastidores que ensambló la marca del modelo de competición. Un modelo que llegó a obtener la victoria en las 24 Horas de Le Mans.
Modelo | Año | Casa | Precio |
---|---|---|---|
Aston Martin DBR1 Roadster | 1956 | RM Sotheby's | 22.550.000 $ |
McLaren F1 | 1995 | Bonhams | 15.620.000 $ |
Ferrari 275 GTB/C | 1966 | Gooding and Company | 14.520.000 $ |
Porsche 917K | 1970 | Gooding and Company | 14.080.000 $ |
Ferrari 250 GT SWB | 1961 | RM Sotheby's | 8.305.000 $ |
Jaguar E-Type Lightweight Roadster | 1963 | Bonhams | 8.000.000 $ |
Aston Martin DB4GT Prototype | 1959 | RM Sotheby's | 6.765.000 $ |
Ferrari 121 LM Spider | 1955 | RM Sotheby's | 5.720.000 $ |
Ferrari 410 Superamerica | 1959 | RM Sotheby's | 5.335.000 $ |
Ferrari 250 GT Cabriolet | 1959 | Gooding and Company | 4.840.000 $ |
El modelo que logró situarse en segunda posición también fue británico, aunque considerablemente más moderno. El primer bastidor del McLaren F1 importado y modificado para poder registrarlo en los Estados Unidos lograba alcanzar los 15.62 millones de dólares, un precio superior incluso al más alto conseguido por una de las raras y exclusivas versiones LM del F1. Por lo que este se convertía en el ejemplar del modelo por el que se ha pagado más en una subasta.
En tercer lugar encontramos uno de los solo 12 Ferrari 275 GTB/C fabricados por Ferrari para suceder a nada menos que el 250 GTO en la categoría GT del Campeonato del Mundo de Constructores, como el sucesor de nada menos que el icónico y exitoso 250 GTO. Aunque a simple vista parece un 275 GTB más, lo cierto es que a nivel interior tiene más elementos en común con los 250 LM y 250 GTO que con el modelo del que en teoría deriva.
De hecho, incluso el bastidor ligero de estas versiones era nuevo, además de contar con una carrocería más delgada. Esta unidad alcanzó sus estimaciones previas y logró llegar a los 14.52 millones de dólares, convirtiéndose en el ejemplar más caro del modelo, aunque aún lejos de los los 275 GTB/C Speciale que la marca lanzaba la temporada anterior. De esta serie Speciale solo se fabricaron 3 unidades, todas ellas mucho más cotizadas.
Un caso similar a los anteriores lo encontramos en el cuarto puesto, con la unidad más conocida del Porsche 917K, el bastidor 917-024 del mítico modelo que es considerado por muchos especialistas como el deportivo de competición definitivo. Este había sido empleado como coche cámara en la película Le Mans de Steve McQueen, además de protagonizar uno de los barn-find más llamativos de los últimos tiempos, ya que tras 25 años desaparecido, era descubierto en un granero cerca de París, donde había estado oculto y olvidado durante más de 23 años. Este logró alcanzar los 14.08 millones de dólares, convirtiéndose inmediatamente en el Porsche más caro de la historia.
Tras estos podemos encontrar otros 4 Ferrari, un 250 GT SWB de batalla corta (perteneciente a la Ferrari Performance Collection), un raro 121 LM Spider, un 410 Superamerica y un 250 GT Cabriolet de 1959. A estos los acompañan otros dos modelos ingleses, un prototipo del Aston Martin DB4GT y un llamativo Jaguar E-Type Lightweight Roadster, que cuenta con la particularidad de haber sido empleado por el mismísimo Briggs Cunningham en las 24 Horas de Le Mans de 1963, algo que en los Estados Unidos tiene muchísimo valor, por lo que no es de extrañar que alcanzara los 8 millones de dólares, convirtiéndose en el E-Type más caro hasta la fecha y el tercer ejemplar más caro de la historia de la marca.