El Performmaster G805 es el nuevo widebody de carbono para el Mercedes-AMG G 63

Parece que la misiva entre la marca de la estrella y los especialistas en tuning es más que clara, no desarrollar ningún paquete que rompa la estética del icono de los todoterrenos. Es un denominador común entre las últimas preparaciones conocidas sobre el más potente de la gama de Mercedes Clase G, cuyos kits especiales aumentan la agresividad pero no transforman la imagen característica del «Geländewagen».

Los alemanes de Performmaster también han respectado esta máxima, desarrollando el kit especial «G805». Una serie de componentes fabricados en fibra de carbono, que se puede pintar en el color del gusto del cliente, y que confieren al AMG G 63 una imagen más bruta con la carrocería más ancha. Nada menos que un extra de 100 milímetros es lo que ha conseguido el todoterreno con las nuevas aletas que actúan como pasos de las ruedas. Unas piezas que conectan con los nuevos paragolpes delantero y trasero también hechos del mismo material.

El Mercedes-AMG G 63 alardea de fibra de carbono gracias a Performmaster

Un paquete que cambia la vista, especialmente la frontal. El paragolpes más bajo ahora dispone de un divisor en el borde inferior delantero y unas grandes tomas de aire que surtirán de aire fresco al potente motor que se esconde por detrás, cuyos marcos muestran el entramado de fibra de carbono contrastando con el elegante color elegido para el resto de la defensa y la carrocería. Por lo pronto, se pueden escoger solo dos, a elegir entre los «Verde Oliva» metalizado y el «Negro Noche magno» del exclusivo programa de personalización «G manufaktur».

Para la fibra de carbono, como no puede ser de otra forma, también puede elegirse su terminación, brillante o mate. Los de Performmaster han prestado especial atención a los detalles. Los escapes característicos siguen saliendo por debajo de las puertas traseras, como buen AMG, pero ahora aprovechando una seccionada parte de los estribos laterales que, también están fabricados con fibra de carbono, y además cuentan con iluminación LED, mientras que en la parte trasera la defensa cuenta hasta con un discreto difusor.

El preparador no ha mostrado el interior, pero ofrece una selección de materiales lujosos como Alcantara para revestir el habitáculo. Lo que sí ha hecho es dar una importancia especial al ajuste aplicado en el potente motor V8 de 5.5 litros biturbo que, con sus 585 CV, anima a la versión más deportiva de la gama del Clase G. Una nueva unidad de control del motor y turbocompresores de mayor tamaño son los responsables de las nuevas cifras: una potencia máxima de 805 CV y 1.020 Nm de par motor máximo, cifras que permiten acelerar de cero a 100 km/h en 3,6 segundos y llegar a una velocidad máxima de 260 km/h.