Peugeot y el coche eléctrico, una historia a la vanguardia de la movilidad sostenible

La puesta de largo del nuevo Peugeot e-208 es un capítulo más en la historia de Peugeot en el mundo de la movilidad eléctrica. El pasado del fabricante francés ha estado marcado por el coche eléctrico. Modelos clásicos como el Peugeot VLV y la versión totalmente eléctrica que estrenó el Peugeot 106 son un claro ejemplo de la apuesta de Peugeot por el coche eléctrico.

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Publicado: 10/04/2019 19:45

Peugeot e-208

Peugeot e-208, el nuevo coche eléctrico de Peugeot se sitúa como la punta de lanza de una ofensiva eléctrica.

Peugeot ha iniciado un nuevo capítulo en su historia sobre la movilidad sostenible. El lanzamiento del nuevo Peugeot e-208 marcará el pistoletazo de salida a la ofensiva eléctrica en la que está trabajando una de las principales marcas del Grupo PSA. La nueva generación del 208 estrena una versión totalmente eléctrica que apunta al mercado de masas y que rivalizará directamente con el Renault ZOE, una de las referencias del mercado.

Sin embargo, antes de la puesta de largo del nuevo Peugeot e-208 el fabricante del león ya contaba en su gama con distintos vehículos totalmente eléctricos. Peugeot puede presumir de ser uno de los principales fabricantes de automóviles que más fuerte ha apostado por la movilidad sostenible. Tanto en su historia pasada como en la actualidad. El Peugeot iOn y el Peugeot Partner Tepee Electric son un buen ejemplo de ello.

Peugeot es una de las marcas francesas con más historia relacionada con la movilidad eléctrica.

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Si nos remontamos más de medio siglo atrás en la historia de Peugeot, nos encontraremos con los primeros pinitos comerciales de la marca en el mundillo de la movilidad eléctrica. El Peugeot VLV nació durante el periodo de la Segunda Guerra Mundial con el objetivo de esquivar las restricciones de combustible impuestas por las autoridades de ocupación alemanas. Presentado en mayo de 1941, este coche eléctrico fue la solución planteada por Peugeot para asegurar la movilidad de servicios de atención sanitaria o la administración de Correos.

Peugeot VLV

El Peugeot VLV vio la luz en el año 1941, su autonomía se situaba entre los 75 y 80 kilómetros.

VLV, el primer eléctrico vendido por Peugeot

El Peugeot VLV, un «mini-cabriolet» equipado con 4 baterías de 12 volitos, contaba con una autonomía de entre 785 y 80 kilómetros. Las baterías desarrollaban una potencia de 3,3 CV y se podían recargar en cualquier enchufe. La velocidad máxima que podía alcanzar este automóvil eléctrico era de 36 km/h. En total fueron fabricadas 377 unidades. El régimen de Vichy prohibió su producción en 1942. Como detalle curioso, la tradicional insignia de Peugeot fue sustituida por un rayo.

Peugeot 104 Eléctrico, el inicio de una saga de prototipos

Tras este primer acercamiento a la movilidad eléctrica, hubo que esperar a la crisis del petróleo de los años 70 y 80 para ver cómo Peugeot apostaba de nuevo por la propulsión eléctrica como solución a los motores de combustión tradicionales. Tomando como base el Peugeot 104 se creó un prototipo de vehículo eléctrico con el que se recorrió 30.000 kilómetros por año. Estaba dotado con baterías Alstom. En 1982 se fabricaron 20 unidades del Peugeot 205 eléctrico.

La experiencia cosechada durante toda la fase de pruebas fue clave para afrontar el desarrollo de la versión eléctrica del furgón Peugeot JT, de la que fueron entregadas 50 unidades a la petrolera ELF en 1989.

Peugeot 106 Eléctrico

En 1995 llegó al mercado una versión 100% eléctrica del Peugeot 106. Tenía 80 kilómetros de autonomía.

Peugeot 106 Electric, la antesala del coche eléctrico moderno

Peugeot dio un salto cualitativo en 1995 al comercializar la versión eléctrica del Peugeot 106. Era capaz de alcanzar una velocidad máxima de 110 km/h y su batería podía ser recargada al 80% en solo dos horas. Su autonomía estaba fijada en los 80 kilómetros, convirtiéndose en una opción real y válida para entornos urbanos. Fue empleado en la plataforma de vehículos compartidos Autolib, en la ciudad francesa de La Rochelle.

Fuente: Peugeot

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