Dakar 2021Los pilotos pierden la paciencia con la 'gymkana' en la que se ha convertido el Dakar
Las dificultades para navegar en las primeras cinco etapas del Dakar han hecho que ya varios pilotos hayan elevado el tono de sus declaraciones hasta llegar a la queja directa. El último ha sido Carlos Sainz, vigente campeón, que afirma que en sus 14 participaciones nunca se había sentido así.
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Publicado: 07/01/2021 19:30
David Castera ya advertía antes del Dakar 2021 que iba a poner el foco en la navegación. En el debut del raid en Arabia Saudí en 2020 se cortó un poco de sus intenciones por dos motivos: llegaba a un país que no conocían para la disputa de una prueba de estas características y no quería asustar a los anfitriones con quejas desde el primer momento.
En esta edición sólo ha tardado 5 días en desquiciar a los competidores. Las declaraciones de todos apuntan al mismo lado y sólo hay que ver lo ocurrido con pilotos de la talla de Sebastien Loeb o el vigente campeón, Carlos Sainz, para entender que ya no es que estén decepcionados, sino que están muy frustrados.
Una de las fotos de esta etapa cinco es la que abre este texto. En ella, se ve a los citados Sainz y Loeb intercambiando unas palabras, cada uno en una dirección, mientras llega por detrás Al-Qassimi con una trayectoria distinta. No les falta razón para estar sorprendidos, ya que este año han modificado de manera radical varias premisas del 'roadbook', foco de todas las iras.
Desde entregarlo con apenas 10 minutos de margen (20 para las motos), hasta convertirlo en una tablet que evita que cada uno coja sus notas, o cambiar el número de 'way points' intermedios que hay que cruzar, además de reducir su radio de activación, los copilotos se han convertido en aún más fundamentales que nunca. El problema es que eso para los pilotos, en este caso, es un problema: muchas veces no saben ni cómo deben ir de rápido por miedo a saltarse un punto de control que les haga volverse locos para encontrarlo.
Carlos Sainz lleva dos jornadas consecutivas con serios problemas. El siguiente vídeo es muy elocuente: el 'Matador' dando vueltas sobre sí mismo intentando encontrar el punto de control que el GPS marca y no se activa.
La desesperación del tricampeón del Dakar es notable. Ya no se corta en decir que está frustrado y enfadado.
«Esto se está volviendo más un gymkana que un rally raid. He hecho catorce Dakar y lo que estoy viendo hasta ahora no es un rally... no me gusta. Nunca en mi vida me había perdido dos veces seguidas media hora», criticaba. El madrileño y Lucas Cruz, que habrá tenido que soportar la frustración propia y de su compañero (y su carácter) en el coche, es notable y entendible: cede 48 minutos con un Stepháne Peterhansel que, de momento, no ha ganado ninguna etapa, pero que sigue sin cometer grandes errores.
Carlos Sainz: «Esto se está volviendo más una gymkana que un rally raid»
Sainz no es el único, ni mucho menos, que se ha quejado. Sebastien Loeb ya ha tenido varias jornadas de quejas, especialmente por una sanción de cinco minutos que le impusieron por ir a demasiada velocidad en una zona neutralizada. Su excusa: no le había saltado el aviso en el coche.
«Necesito compartir con ustedes la incompetencia del colegio de comisarios de un evento tan legendario como el rally Dakar. Nos acaban de penalizar con 5 minutos por sobrepasar la velocidad en un área controlada. Durante todas mis participaciones, durante todas las etapas y durante todas las zonas de control de velocidad, siempre he hecho todo lo posible por respetar esta regla. Con la única condición de que el sistema GPS, a través de una alarma, nos avise cuando ingresamos a estas áreas invisibles. Hoy, en esta área donde estamos penalizados, la alarma no sonó al ingresar en ella, y por lo tanto, no podría desacelerar a tiempo», se justificaba con una dura carta.
Además, este mismo jueves afirmaba que se había quedado «atrapado» por la navegación, además de tres pinchazos que le han lastrado. Eso ha hecho que el galo ocupe la 20ª posición a más de 50 minutos del líder.
Quejas de todos... menos de Peterhansel
Stepháne Peterhansel sabe muy bien moverse en las dunas políticas del Dakar. El hombre que más veces ha ganado el raid más duro del mundo es consciente de que criticar en público (que no en privado) a la organización no le va a traer beneficios, y suele callarse al respecto.
Incluso, si hace falta, romper una lanza a su favor. Es uno de los pocos que no ha estallado este jueves contra la organización o se ha quejado de problemas de navegación. «Ha sido una etapa real de Dakar, con navegación complicada, dunas, pistas con grandes rocas y ha sido muy bonito pilotar en ella. Al final era muy bonito conducir por este ese paisaje. Ha sido una etapa muy selectiva», elogió, incluso. Fue el único. Otros muchos pilotos apuntaron a los problemas con la navegación sin cortarse.
Estas son algunas de las quejas de los pilotos:
Joan Barreda: «Ha sido una de las etapas más duras que recuerdo»
Laia Sanz: «Al principio me he perdido y habré tardado unos 15 minutos en encontrar el camino correcto»
Kevin Benavides (ganador del día): «Ha sido un día duro para mí. Al principio me he perdido, como la mayoría de los pilotos»
Ricky Brabec: «Perdí el rumbo y también la confianza en mí mismo (...) Llegué a un lugar y había seis pilotos perdidos, haciendo círculos»
José Ignacio Cornejo: «Ha sido una etapa difícil, hacía tiempo que no veía algo así»
Nasser Al-Attiyah: «No ha sido nada fácil abrir hoy la pista pues venían muchas motos en sentido contrario, lo cual nos confundía. Habremos perdido unos 8 o 9 minutos al principio de la etapa»
Y se podría seguir así en un largo etcétera. La jornada de este viernes será otro infierno parecido, muy larga, sobre dunas y con el cansancio acumulado que podrán recuperar cuando llegue el día de descanso. Pero para ello hay que llegar... aunque sea muy tarde.
Fotos: ASO